Capítulo 43
POV Sheila.
Sigo a Will por toda la casa hasta llegar al patio trasero. Las luces del atardecer dejan un bonito color naranja en el cielo. Mientras le sigo no puedo evitar recordar ese momento en el que se ha alimentado de mí, esa forma de sujetar mi cuerpo fuertemente contra el suyo. Un rubor empieza a cubrir mis mejillas y decido dejar de pensarlo.
–Lo primero que vas a aprender es la leer la mente. Es uno de los poderes más básicos de los vampiros con sus almas –habla con la voz un poco más grave de lo normal.
–¿Cómo hago eso? –pregunto curiosa.
–Concéntrate en mí, trata de intentar entrar en mi mente sin moverte.
Sonrío, pero intento centrarme en entrar en su mente, como si lo estuviera haciendo físicamente.
“Está pensando en cómo te quedaría un vestido negro” dice Kar en mi mente, su voz suena tranquila como siempre, pero tiene algo raro.
–Piensas en cómo me quedaría un vestido negro –murmuro insegura.
–¿Cómo es el vestido? –pregunta entrecerrando los ojos.
Entrecierro mis ojos también y me veo a mi misma en un largo vestido negro de satén, con mi pelo suelto y las puntas rizadas.
–Es de satén, largo hasta los pies, y llevo el pelo ondulado en las puntas.
Will sonríe, –¿sabes cuándo te verás así de preciosa? –pregunta curioso.
Frunzo el ceño y creo que la pregunta se refleja en mi cara.
–En nuestra ceremonia de unión, Sheila. Es tradición que la alma vaya de satén negro, el vestido debe ser de tirantes por obvias razones –mueve las cejas cuando dice lo último.
–¿Será público? –pregunto espantada.
–No, solo el intercambio de sangre, el resto es privado, aunque igual en tu caso se nos unen un par de personas –murmura pensativo.
–¿Un par de personas?
–Tus otros dos compañeros, por supuesto. A mi me da igual que estén o no, pero haré lo que sea necesario para complacerte, Sheila –su voz sigue siendo ronca, pero ahora ha dejado atrás cualquier señal de comicidad.
–¿Dejarías que haya dos hombres más con nosotros? –pregunto curiosa.
–No es que me haga especial ilusión, y más teniendo en cuenta que uno es el alfa de la manada más grande del continente, pero sí. Si tu me lo pidieras haríamos el ritual de intercambio en este mismo momento. Sé que no es una situación fácil para ti, solo voy a intentar que sea lo más sencillo por mi parte –la sinceridad en sus palabras me deja claro que la edad le ha hecho templar los celos.
–Creí que los vampiros eran tremendamente celosos –murmuro.
–Soy muy celoso con lo que me pertenece, pero resulta que no soy el único, hay un lobo y un druida a los que también les perteneces. Asique si quiero que todo sea mejor, debo de controlar mis celos –dice sincero, –deja de intentar distraerme, Sheila. Tienes que seguir entrenando. ¿Qué pienso ahora?
Fijo la mirada en Will y en su pelo rubio, me centro en intentar entrar en su mente a través de sus potentes ojos azules. Poco a poco empiezo a vislumbrar la imagen de Will en la biblioteca de su casa.
–Estás en la biblioteca de tu casa –sonrío.
–Casi, pero me temo que no has acertado del todo.
Vuelvo a entrecerrar los ojos y veo que es el momento en el que estuvimos a solas por primera vez, el día que nos dimos nuestro primer beso.
–Nuestro primer beso –murmuro.
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La guardiana (1)
FantasyLa actual guardiana del mundo humano debe ceder su puesto a su sucesora: Sheila. Sheila cree que es una chica normal, ha vivido sus casi 20 años yendo a la escuela y con un interés especial por lo sobrenatural y la mitología sin saber por qué. Su m...