POV William
Desde que Sheila entró en mi casa ayer he sentido algo nuevo en ella. Es difícil de explicar, pero al ser un vampiro he hablado con mi hechicera de confianza para que me diga si se sabe algo de lo que sea que le este pasando, y lo único que me ha dicho es que tiene varias especies en elle misma, es decir, es una híbrida de lobo, vampiro y druida. No se como es posible, pero lo único que me importa es que llegue la tarde para ir a ver a Emérita y empezar a entrenar a su parte vampírica.
Es un trato al que he llegado con la actual guardiana, ella me deja acercarme a mi alma para entrenarla y cuando ella tenga plena consciencia de lo que esta pasando a su alrededor, podrá elegir que quiere hacer. Yo por mi parte, me he pasado toda la noche leyendo libros de entrenamiento a nuevos vampiros para saber como entrenar a mi alma.
Como rey de los vampiros tengo acceso a todo el conocimiento que ha ido recopilando nuestra especie, y con la ayuda de Nickolas, he podido trazar un plan de entrenamiento que la convertirá en una vampira que sepa alimentarse y defenderse siempre que lo necesite en menos de 2 semanas.
Menos de 2 semanas es el tiempo que falta para que la nueva guardiana tome posesión de su puesto y, rezo para que sea por lo menos parecida a Emérita. No es que las druidas me gusten, todo lo contrario, pero lo prefiero a que sea una loba o una vampira. Si fuera una loba no pensaría en lo que sucedería en territorio de vampiros y si fuera una vampira no sabría lo que ocurriría en el territorio de los lobos. Por eso lo mejor es que sea una druida, a medio camino entre ambas especies.
-Si no dejas de pensar a esa velocidad, estoy seguro de que necesitaras sangre antes de lo normal – me habla Nickolas sacándome de mis pensamientos.
-No seas idiota, solo estoy pensando en mi alma, en como la voy a entrenar y – me interrumpe con una sonora carcajada.
-Para el carro Will, solo la has besado una vez y, además me has contado que tiene una parte de loba, ¿qué tan seguro estas de que no esta ahora mismo con el lobito haciendo lobitos? – me pregunta creándome un enfado con el solo hecho de pensarlo.
-Estoy seguro de que ella solo esta entrenando con el lobo; además, su abuela me ha dicho que ella te tiene pánico a los lobos y, en el avión lo pude comprobar. Así que si, estoy muy seguro de que ella no piensa en el lobo como su mate, sino como un amigo – digo muy seguro de lo que pienso.
De repente siento como si ella me estuviera llamando, haciendo que gire la cabeza hacia la puerta para encontrarme con Anna. Frunzo el ceño y la miro enfadado y ella solo sonríe.
-Relájate rey, deberías dejar de ser tan susceptible a la presencia de cierto tipo de personas. ¿Desde cuando te gustan las lobas? – me pregunta acercándose hacia mi con su mirada.
-Ella no es solo una loba Anna, es la primera trihíbrida que existe y tengo que entrenar a su parte vampírica esta tarde – digo empezando a enfadare con ella por el tono que esta usando al referirse a Sheila.
-Por supuesto que es solo eso, ¿verdad Will? – pregunta haciendo hincapié en su pregunta final.
-Tanto si eso es todo como si no, a ti eso debería de darte completamente igual Anna, ¿estas ocultando algo enana? – pregunta Nickolas molestando a Anna.
-No oculto nada, solo es que no entiendo por que el rey de los vampiros esta tan preocupado por entrenar a una niña, por muy poderosa que vaya a ser – habla Anna empezando a pasearse por toda la estancia.
No soy idiota, Anna es una vampira de 300 años, si quisiera podría hacerle mucho daño a Nickolas e intentar herirme a mi, aunque a mi no me fuese a hacer nada por que la saco mas de 200 años. Anna pega un grito desde donde se encuentra y tanto Nickolas como yo nos miramos extrañados. Anna es una de esas vampiras que tiene dones especiales, ella ve visiones y, supongo que ahora mismo acaba detener una, por que le grito que acaba de pegar no es normal.
-Esa niña no es solo la primera trihíbrida Will, esa niña es tu alma y tu ya lo sabías. ¿De verdad la que esta destinada a ser nuestra reina no sabe absolutamente nada de nuestra especie y necesita un entrenamiento para simplemente ser ella misma? ¿Pero de donde ha salido esa niña? – me habla Anna furiosa, mas bien diría rabiosa. Se que lo que acaba de decir es verdad y también tremendamente duro.
Soy perfectamente consciente de que Sheila no sabe nada o casi nada del mundo sobrenatural y esta destinada a ser la reina de los vampiros. También soy muy consciente de que tiene un compañero lobo y otro druida, pero vamos a ver, ¿es que de verdad nadie parece entender que a mi me da igual? Yo la quiero tal cual es y no me importa nada más. Se que apenas la conozco, pero el simple hecho de que sea la única vampira que se puede comunicar con su vampira interna y de que sus poderes hayan estado dormidos hasta que su pareja destinada los haya despertado me interesa.
-Me da exactamente igual o que pienses Anna, Sheila va a ser entrenada por mi y después se convertirá en tu reina debido a que se unirá conmigo – digo dando por finalizado el tema; – ahora, ¿tienes la información que te pedí? – la pregunto yendo directo al tema y sacando a Sheila de los pensamientos de Ana.
-Nadie habla mucho sobre la nueva guardiana Will, solo se sabe que esta bajo la protección de la actual guardiana, que vive en su casa/academia y poco más – habla como si fuera una grabadora, genial, se ha enfadado.
-Muchas gracias por la información Anna – la digo justo antes de despedirla y que desaparezca de mi casa.
-Siempre me he preguntado que se siente al saber que tu alma, la única persona que te va a amar por toda la vida no te corresponda. Pero desde luego, nunca pensé que mi futura reina fueses a ser una mezcla de las 3 especies mas complicadas y enrevesadas que existen sobre la faz de la tierra – me habla Nickolas con su tono sarcástico. Bufo ante sus palabras.
- ¿Se puede saber que estas insinuando con eso, Nickolas? – pregunto empezando a enfadar.
-No estoy insinuando nada, solo te estoy diciendo que tu alma es como un coctel molotov y que en cualquier momento puede explotar. Tú eres el que no lo entiende. Tiene la magia de una druida, la fuerza y la velocidad de una vampira y el temperamento de una loba, ¿estás seguro de que oliste bien y es tu alma? – pregunta Nickolas otra vez haciendo que pierda la poca paciencia que tengo.
-Estoy mas que seguro de que ella es mi alma, principalmente porque en cuanto la vi, supe que quería estar con ella. A diferencia de otros que la tiene delante y por miedo a que las cosas no salga bien la rehúyes y ocultas tu esencia ante ella. Dime Einstein, ¿Qué crees que va a pasar cuando Anna se entere de que su alma ha estado delante de ella todo este tiempo y no se ha enterado por que su alma e un cobarde que le tiene miedo a los sentimientos? – digo avanzando lentamente hacia el con mis ojos ahora completamente rojos: estoy enfadado, muy enfadado y furioso, no es una buena combinación.
-Guau Will, veo que sigue siendo el mismo hijo de puta de siempre. Sabes que el tema de Anna es complicado, y va mucho mas allá de no querer tener sentimiento o cualquier cosa por el estilo. ¿O te tengo que recordar que ha pasado cada vez que uno de los vampiros de alto nivel encontraba a su alma y lo hacia público esta moría sin ninguna explicación aparente?- me habla la maldita maldición que recubre a los vampiros de alto nivel.
-Yo, a diferencia de ti no le tengo mido a una maldición por que se que Sheila estará siempre a mi lado y será entrenada por mí, lo que la hará ser letal ante cualquier idiota que intente hacerla daño – digo dando por terminada la conversación con Nickolas.
Cuando algo del salón en el que estábamos me acerco hacia la salida y veo la hora: es la hora de comer, lo cual quiere decir que Sheila estará comiendo y después tendrá su segunda clase con el druida. Salgo por la puerta de mi casa y ando hasta que me interno dentro de la reserva natural.
Cuando pasan unos 10 minutos me doy cuenta de que he salido andando despreocupado y completamente tranquilo, y que probablemente eso deberé de evitarlo ahora.
Ahora ando prestando atención a todo lo que hay a mi alrededor, principalmente al bosque y a lo que oigo: las hojas de los árboles, el sonido de mis pasos contra el suelo y a los lobos. A los lobos naturales y animales que viven en la reserva.
Sigo caminando sin ningún problema hasta que llego a un pequeño claro en el que hay unos 15 lobos. Sonrío al darme cuenta que la mayoría son cachorros y las lobas los vigilan constantemente.
Como no quiero molestar ni que se asusten me escondo entre los árboles y me concentro en eliminar mi aroma del aire. Cuando estoy seguro que ya no me sienten sigo caminando hacia el hogar de Emérita, donde me espera Sheila.
A la media hora llego al pequeño pueblo de Diamond Black y sonrío. Este pueblo siempre ha sido habitado por seres sobrenaturales, pero desde que a la gente le gusta visitar la reserva muchos se arriesgan a quedarse en este pueblo. Me doy una pequeña vuelta por la plaza central del pueblo y llego al hogar de Emérita, a los 5 minutos andando del pueblo, y perfecto para entrenar a los cachorros y brujas inexperta.
Cuando me acerco a la puerta de la casa me doy cuenta del escudo que la reviste y esbozo una sonrisa, como si eso fuera a detenerme. Decido comportarme y llamo al timbre. A los pocos segundos una hechicera rubia vestida de verde me abre la puerta. Presto un poco de atención a sus ojos y su forma de mirarme y me acuerdo de ella: es la hechicera que abrazó a Sheila en el aeropuerto.
-Hola, buenas tardes mi nombre es – no me deja terminar de hablar cuando ya me ha interrumpido, acto que me hace fruncir el ceño.
-William Blood, el rey de los vampiros – habla muy segura; – encantada soy Sarah, al mejor amiga de Sheila y la que te matara como se te ocurra hacerle daño, y hablo solo del físico – termina mirándome a los ojos.
-Encantado Sarah. Deberías de saber que nunca le haría ningún tipo de daño a Sheila, ni físico ni emocional, antes muerto – espeto de forma rápida y sincera.
-Me alegra escuchar eso entonces, pasa por favor. Sheila esta en la cocina con mi hermano y Emérita hablando de sus cosas, y supongo que esas cosas te interesan – habla guiándome hacia la cocina.
Atravesamos un enorme salón repleto de sillones y de ventanas que lo hacen aun mas espacioso de lo que ya es. Luego entramos en un pequeño pasillo que lleva a una gran cocina. Veo a un montón de lobas y brujas cocinando y en una esquina a Sheila, Emérita y el druida.
-Vamos, no seas tonto, acércate. No creo que a Emérita le haga mucha ilusión que hayas venido a llevarte a Sheila después de lo que ha pasado por la mañana, pero parece que a Emérita le has caído en gracia – me habla sincera. O esta chica habla mucho, o nunca le han dicho que su voz es un poco molesta para los oídos demasiado delicados cuando habla en ese tono de voz.
Me centro en analizar a mi perfecta alma y no se por donde empezar. Desde su pelo increíblemente largo y liso que le llega hasta la cadera en ese tono fuego con unos leves destellos en naranja; pasando por ese increíble uniforme rojo que le queda como si fuera una ua segunda piel; y para terminar esos increíbles ojos verdes que parece que te estén observando el alma cada vez que tienes la suerte de que miren.
-Oh, William, veo que la puntualidad vampírica te precede – habla Emérita con tono de voz más alto de lo normal. En el momento en que ha mencionado que soy un vampiro, varias de las lobas que estaban cocinando se han quedado quietas y completamente estáticas como si las fuera a atacar y; las brujas han dado un paso hacia delante para intentar proteger a las lobas de un ataque por mi parte.
-No voy a hacer daño a ninguna loba ni a atacar a ninguna bruja Emérita, por favor dile a tus chicas que continúen con lo que estaban haciendo con normalidad por que me siento incómodo – hablo seriamente haca la guardiana.
-William, podemos hablar en privado, ¿por favor? – me pregunta Sheila mirando en mii dirección a lo que yo asiento un poco extrañado; – acompáñame a mi habitación por favor – me dice justo antes de cogerme por la muñeca y arrastrarme hacia las escaleras.Capítulo largo, espero que les guste❤️.
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La guardiana (1)
FantasiaLa actual guardiana del mundo humano debe ceder su puesto a su sucesora: Sheila. Sheila cree que es una chica normal, ha vivido sus casi 20 años yendo a la escuela y con un interés especial por lo sobrenatural y la mitología sin saber por qué. Su m...