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Acabo con el eyeliner y pestañeo varias veces viendo que haya quedado bien.

Cuando salgo de la habitación, Jin y lisa están frente a la encimera preparando lo que parece el desayuno, me lo confirma el riquísimo olor a comida que me penetra la nariz. El sonido de la puerta al ser cerrada por mí atrae la mirada de ambos.

-Buenos días- digo con una sonrisa que ellos me devuelven. Pongo a Dae en el sofá y prendo la televisión para que se entretenga.

- ¿Dormiste bien?- me paro al lado de Lisa

-Umjum- asintió convencida- ¿y tú?- me pregunta, seguro teniendo en cuenta que sus palabras fueron las últimas que escuché antes de irme a dormir.

-Estupenda- respondo como si nada.

Lisa hace una mueca y desvia la mirada - No debí decirte eso ayer. Yo solo quería que habláramos un poco y... no sé, creo que me dejé llevar. Ahora me siento mal por confundirte.- sus ojos retornan a mí con un atisbo de culpa.

-¿Confundirme?- repito la palabra esencial- Lisa, estoy bien ¿ok?, eres mi mejor amiga, escucho de ti lo que sea.

-¿Entonces todo bien- alza una ceja, desconfiada.

-Que sí- repito divertida, poniendo los ojos en blanco.

-¿Saben en donde está Eun?- esta vez la pregunta va dirigida a mi hermano también, quien me mira y me responde.

-En la habitación. Ve a ver que hace, la quise ayudar a vestir pero dijo que no quería.

-De acuerdo yo voy.

Me pierdo por el pasillo y cuando empujo la puerta entreabierta, encuentro algo que no me esperé para nada: Eun-Sang teniendo los labios en un pico mientras pasa por ellos un lápiz labial que identifico como mío. Debido a su tamaño no alcanza al espejo pero llega bien trepada en una silla. Tiene el pelo recogido en una coleta baja que está bastante desorganizada, y lo que se puede decir un pequeño desastre en la boca. Aunque soy consciente de que ha hurgado en mis cosas y me ha robado un cosmético, no me molesto.

Doy varios toques en la madera de la puerta, Eun da un saltito gracioso en el lugar, el pintalabios se le resbala de las manos y la silla tintinea al ella bajarse rápidamente.

Va a pasarse las manos por la falda pero ve que las tiene embarradas de pintura y solo le hecha un ojo con decepción al objeto , como si fuese un traicionero por caerse de sus manos.

-¿Que haces?- me le acerco poniendo las manos en mis rodillas una vez la tengo frente a frente, sin intenciones de regañarla como de seguro pensaba.

-Perdón por coger tu labial...- juega con sus dedos- es que me gustaba y tú no me lo prestarías- dice sin mirarme.-, entonces lo robé.

Me le agaché delante- A ver, deja que te mire- dije moviendo su cara hacia los lados, reprimiendo una sonrisa divertida

-¿Estoy fea?- pregunta, sus ojos negros me miran con el flequillo casi rozando las pestañas.

-Que va, estás guapa- sonreí levemente

-No es cierto, estoy embarrada por todas partes, mira- dijo señalado con su dedo

-¿Por qué te querías pintar?- curioseé

-Un niño de mi salón me gusta y quería...verme bonita como tú, pero no me salió bien- la escucho, recogiendo del suelo el labial, estaba roto y había quedado una mancha en el suelo y en mis dedos.

Decido no perder tiempo ahí quieta, me puse de pie y busqué algo para limpiarle el rostro, ella me sigue con la mirada- ¿Y ya le dijiste al chico que gustas de él?, pero se lo tienes que decir en Inglés, eh.- me vuelvo a agachar, ahora de rodillas.

Fake Wings (ᴋ.ᴛ.ʜ ʏ ᴛᴜ)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora