La señora nia, camina ha buscar ha romi lo encontró, en la calle
Nia: Hola Oguines, que gracia tienes lo mismo que yo en tus manos
Romi, tiene en las mano tarjetas de colores de plástico (No tarjetas, de visita)
Nia: Las encontré en el buzón, de mi casa
Romi: Yo también las encontré en el buzón, de mi casa, eran muchas
Nia: Que tenemos que hacer con ellas, en el buzón un escrito decía (Tarjetas de la felicidad)
Romi: Si, ponía lo mismo en mi buzón, creo que hay que repartirlas, ha las personas necesitadas
Nia: Como podemos sabes quienes son las personas, necesitadas
Romi: Creo que nos lo mostrara Jesus, oh las tarjetas de el
Ambos comenzamos ha caminar sin mas, al tiempo en contramos un hombre sentado en un banco de madera, en el parque muy cabizbajo y vista perdida
Nia: He se señor, parece necesitar una tarjeta, pregúntale
Romi: Hola señor tantos son sus problemas
Hombre: Tantos y tantos mañana, me echan de mi casa
Romi: Si que es un gran problema, yo lo he pasado que le parece ha usted si le diera una tarjeta, ha la que puede pedir su necesidad
Señor: No creo en eso, que me dice
Romi: Si fuera, real
Hombre: Seria ver, ha Jesucristo, en mi vida
Nia: Este es de los nuestros. Oguines
Romi, le entrego una de las tarjetas de la felicidad, seguimos ambos andando, buscamos necesitados
Nia: Oguines yo he repartido dos tarjetas
Romi: ha quien as repartido, tu sola
Nia: Ha una joven que tenia que ir a la Universidad, mas una mujer mayor, no se que me dijo que necesitaba
Pasado el tiempo no sabemos cuanto, terminamos de repartir todas las (Tarjetas de la felicidad) entonces apareció el ángel. Chino
Nia: Hola Chino, de las tarjetas puedo sacar algún dinero, para mi
Ángel Chino: Si es por una necesidad, podrá sacar dinero, si no es necesidad no lo tendrá ni usted ni nadie, salvo que sea algo muy necesario, muy muy necesario (Recalco mucho)
Posdata. Romi que mas quisiéramos que arreglarnos con Jesucristo, como que fuere un bancario y explicarle, con entendimiento
Por desgracia no creemos lo suficiente en su nombre Jesus, es mucho mas que cualquier bancario de la tierra, solo tienes que esperar en que le agrades, como hijo y tendrás vida
El nuevo y primer mandamiento, es (No te opongas ha tu Dios) todo lo demás viene añadido
Tu cuerpo y tu mente te dirán, lo que es oponerte ha tu Dios, se desfallece sin Jesus, viviente
Bendito el nombre de Jesus, que viviente que reina para todo ser, como padre y Dios, superior