Nia y Romi están en el claro de un bosque, tienen diez cubos pequeños en color azulon.
Romi ha hecho un circulo con ellos, uno pegado al otro.
Romi: Nia hay que llenar estos cubos de agua, por donde vinimos vi una gasolinera, hay tienes cuatro garrafas, ve ha llenarlas de agua.
Nia: Que dices que valla, yo sola arranca el coche, ven con migo son cuatro garrafas, como las traigo llenas de agua.
Romi: Llevas razón, no te enfades, vamos juntos.
Llegados ha la gasolinera, llenaron las garrafas de agua y volvieron, donde los cubos llenándolos de agua los diez.
Romi: Cuando se hayan consumido, el agua de los cubos tendremos todas las ayudas de Jesus, te pido un favor nia que vigiles los cubos, que vengas ha verlos todos los días.
Nia: Todos los días, me pides que venga, déjame día si día no.
Romi: Si nia de acuerdo, lo haces asi por favor
Ambos, se fueron para sus casas, pasado el día.
Nia: Chino, me pidió romi que vigile los cubos, están lejos es muy molesto.
Ángel Chino: No le deje solo, haga lo que le pidió
Nia camino día si día no, para vigilar los cubos.
Pasado el tiempo
Móvil. Nia: Ojines se consumió, el agua de los cubos, ya sabes que con el calor se consume antes, estamos en verano.
Romi: Tan pronto, se consumió, no lo esperaba.
Nia: Yo, también me asombre.
Romi: No queda nada de agua
Nia: Quedan unas gotas en los cubos
Posdata. Llego la mano de Jesucristo, ha nuestras vidas y las de muchas otras familias, que dependen de Jesus, en nosotros.
Romi: Bendito el Dios que vive y reina por los siglos de los siglos, porque su existencia es de amor y bendicion, para todo ser humano desde el nacimiento, de los dos primeros seres.
