Capítulo 35

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Las imágenes que uso para ilustrar la historia no son mías, sino que las encuentro en google.

Marinette:
Me sentía patética, le temía a una persona común y corriente, casi de mi edad. Como una portadora de miraculous, eso era más difícil de digerir. Era muy tentador saber que podría tomar cualquier miraculous para asustarlo, y hacer que me dejara en paz, pero eso no era lo correcto.

Debía hallar otra manera de mantener a ese tonto a raya. No se atrevería a intentar forzarme en público, ¿verdad? Así que si alguien me acompañaba 24/7, Ethan no tendría oportunidad de acercarse a molestarme, al menos, no físicamente.

Tomé mi celular, y llamé a Alya, contandole todo lo sucedido, y haciendo énfasis en el hecho de que nadie más podía saberlo porque si yo lo delataba, quedaría como que todos me hicieron caso solo por ser Ladybug, y tampoco quería eso. Le conté a Alya sobre mi análisis, y mi plan para mantenerlo alejado.

—Mmmm...—dijo mi amiga, aún no tan convencida—Puede funcionar, pero que te quede claro, si ese idiota se atreve a hacerte algo, lo mataré, y no me importa si me tienes que quitar mi miraculous, después.

—Sabes que estás loca, ¿verdad?—dije, y sonreí—Y por eso te amo, sis.

—¿Pero no le vas a contar a Adrien? Creo que tu novio tiene que saberlo.

—Ya te dije, él tiene suficiente con todo lo que tiene encima. No lo quiero preocupar con mis tonterías.

—¿Tonterías? Lo que te hizo Ethan tiene nomre, y se llama acoso, y más con lo que te dijo: "Vas a ser mía, Marinette, lo quieras o no." Amiga, no sé a ti, pero eso, para mí, es lo mismo que decir: en cuanto tenga la oportunidad, te voy a obligar a tener sexo conmigo.

—¡Ya lo sé, Alya!—dije, enterrando mi rostro en la almohada—Es por eso que te pido ayuda a ti. Si le digo esto a Adrien, no se va a poder concentrar, va a estar preocupado todo el tiempo... y va a perder el año.

—Si yo fuera chico, querría saber si a mi novia la molesta algún imbécil.

—Sé perfectamente que es acoso, y de lo que se trató su amenaza, pero nada malo me va a pasar porque tú no me dejarás sola en ningun momento, en lo que queda de año, ¿verdad?

—Claro que no, cuenta con mi apoyo en lo que sea, pero no evitarás que te aconseje lo que creo que es correcto.

—Gracias, amiga.

Sabía perfectamente que estaría a salvo con Alya. Cuando se trataba de su mejor amiga, ella no necesitaba un Miraculous para cortarle la cabeza a quien fuera que me hiciera daño.

Unos meses despues...

Jamás le volví a mencionarle nada a Adrien sobre el tema de Ethan, ni a nadie más, solo Alya sabía lo ocurrido, y ella me acompañaba a todos lados. El chico molesto había dejado de acosarme; solo me hablaba para algún tema de la escuela. En el fondo, esperaba que la razón del cambio de su comportamiento hacia mí hubiera sido porque se había dado cuenta de que estaba actuando mal. Había estado yendo casi todas las noches a ver a Adrien, y cuando me ganaba el cansancio, él venía hasta mi casa. Esperábamos a que mis padres se durmieran, y nos dormíamos abrazados, ya fuera en su cama, o en la mía. Me había hecho casi adicta a finalizar, e iniciar mis días en su cálido abrazo.

Adrien:
Habían sido unos meses duros para mí, pero con el apoyo de Natalie, mi mamá, y Marinette, conseguí terminar todos los trabajos a tiempo, y obtener una calificación máxima por ellos. Mi promedio era casi perfecto, hasta ahora. Todo parecía indicar que cerraría onceno grado con un 9.

[1] Bajo las Luces de París [Miraculous Ladybug & ChatNoir]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora