[1] Bajo las Luces de París [Miraculous Ladybug & ChatNoir]

Capítulo 39

Las imágenes que uso para ilustrar la historia no son mías, sino que las encuentro en google.

Adrien:
La señorita Bustiel nos hizo señales para que nos quedáramos parados al frente de la clase. Noté que Alya se había sentado con Nino, pero ambos lucían molestos. Miré hacia mi antiguo asiento, y se encontraba Lila sentada sola ahí, mientras que, en la otra mesa vacía que quedaba, estaba sentado Ethan. Era como si se hubiesen puesto de acuerdo para que Adrien y yo no nos pudiéramos sentar juntos.

—Buenos días, chicos, me complace anunciar el regreso de su compañero Adrien Agreste, y agradecerle a su compañera Marinette Dupain-Cheng por hacer su regreso posible este año—Dijo la señorita Bustiel, y todos comenzaron a aplaudir, incluidos los antes mencionados, quienes sonreían, pero vamos, todos sabíamos que esas sonrisas eran más que fingidas.

—Lila, ¿te podrías mover para que Adrien y Marinette se sienten ahí?—Dijo Alya—Digo, por eso me moví yo de lugar, para que pudieran sentarse juntos.

—Lila, Alya tiene razón. A demás, ese era el antiguo puesto de Marinette—Dijo la maestra.

—Lo lamento tanto, señorita Bustiel, pero es que mi problema auditivo volvió, y no puedo oír con claridad—Mintió Lila.

—¡Qué problema más molesto! ¿Verdad, Lila?—Dije, con bastante sarcasmo en mi tono—Se va, y regresa cuando te conviene para molestarme.

—Querrás decir, para molestarnos—Dijo Adrien, tomando mi mano.

—Oh, basta, Lila—Dijo Ethan, sorprendiéndome—Todos sabemos que te moviste hasta allá solo para que ellos no se pudieran sentar juntos. Vuelve a aquí.

—Ethan, ya te dije que mi problema auditivo volvió, y no podré escuchar la clase, y reprobaré—Sobreactuó Lila, y yo ya estaba perdiendo la paciencia.

—Bien, me muevo yo, entonces—Dijo Ethan, recogiendo sus cosas, y moviéndose para sentarse al lado de Lila.

—Gracias—Le dijo Adrien, y me tomó de la mano, para guiarme hasta nuestro nuevo lugar.

Aún seguía molesta porque planeaba sentarnos detrás de Alya y Nino.

—Lila es una mentirosa de lo peor—Dijo Adrien, molesto, en un tono bajo de voz.

—Lo sé, pero ¿qué le vamos a hacer?—Dije yo, sin darle más importancia al asunto.

—Una maldita zorra, se merece estar en la cárcel con mi padre—Continuó Adrien, en un tono de voz moderado—O peor, se merece morir.

—Adrien, ¿qué estás diciendo?—Pregunté, preocupada por sus palabras.

—SEÑORITA BUSTIEL—Saltó Lila—Marinette está diciendo cosas horribles sobre mí allá atrás.

—Lo sabía—Susurró Adrien, victorioso, y yo aún no entendía lo que estaba haciendo.

—Dice que soy una mentorosa de lo peor, una maldita zorra, y que me merezco estar en la cárcel con Shadowmoth, y que también me merezco morir—Añadió Lila.

Adrien:
—¡YO NO DIJE ESO!—Gritó mi novia, furiosa, luego de levantarse del asiento, y pegar un golpe en la mesa.

—En realidad, yo fui quien lo dijo—Dije yo, calmado, y me levanté del asiento—Disculpe el lenguaje que utilicé para referirme a una chica, pero necesitaba provocarla para exponer su mentira.

—¿A qué te refieres, Adrien?"—Preguntó la maestra, confundida.

—Lo dije en un tono de voz moderada—Expliqué—Si en verdad tuviera un problema en el oído, no me habría escuchado, sin embargo, me escuchó claramente, y entendió cada palabra que dije.