[1] Bajo las Luces de París [Miraculous Ladybug & ChatNoir]

Capítulo 49

Las imágenes que uso para ilustrar la historia no son mías, sino que las encuentro en google.

Marinette:
Después, apareció en el mismo vídeo un fondo negro con una figura en blanco, un puntero, así como que el que ella tenía.... Entonces lo entendí, y supe en donde estaba su akuma. Me acerqué a ella, y con mi yo-yo, le arrebaté el puntero de sus manos, el cual, rompí, dejando salir a la mariposa morada oscura, casi negra. Atrapé el akuma, y lo purifiqué, para luego, lanzar mi amuleto encantado al aire, y reparar todos los daños causados por la akumatizada. A penas me giro, apareció Ethan ante mí.

—Bien hecho, Lady-Mary, otro día más salvando la ciudad, fue un gusto ayudarle otra vez—Dijo, mientras hacía una pequeña reverencia, y extendió su mano, sosteniendo Miraculous de la abeja ante mí.

Me sorprendió en ese momento, es decir, no pensé que me lo entregaría, así como si nada, sin que yo se lo pidiera. Si me quedaba alguna duda de que estaba cambiando para bien, esa acción la despejó totalmente. Decidí darle un voto de confianza, y esperar. Me agaché ante la chica, a quien liberé el día de hoy.

—¿Qué sucedió?—preguntó.

—¿Qué es lo último que recuerdas?—pregunté, sentándome a su lado.

—Estaba en el baño, y leí la carta de rechazo de la universidad—Dijo, y vi decepción en su rostro.

—Mira, solo te diré que todo pasa por algo, trata de enfocarte más en ti, date un tiempo, y mira que otras opciones tienes, a veces lo que creemos que es lo mejor para nosotros, es todo lo contrario... créeme, lo estoy viviendo en carne propia—Dije, pensando en lo sucedido.

Me hice la idea de que Adrien era mi felicidad, me aferré demasiado a su amor, que al final, terminó siendo tan falso como cualquier cosa que diga Lila.

—Espero que me resulte, gracias, y creo que hice algo malo hoy... lo siento—Dijo apenada.

—Tranquila, solo fuiste una víctima más, ahora anda y descúbrete—le dije mientras me levantaba del piso, para luego, tenderle una mano.

—Muchas gracias, Ladybug y a ti también—Dijo, mientras veía a Ethan.

Después, me giré hacia él, y le sonreí un poco.

—Gracias Ethan, creo que en realidad quien salvó a la ciudad has sido tú últimamente—Dije, y suspiré—Ahora, debemos irnos.

—Sí, vamos, por aquí a unos cincuenta metros queda un callejón para que te destransformes tranquila, sabemos que te conocen, pero me imagino que no debe ser bonito ser así como que el centro de atención por momentos.

—Sinceramente, me estoy acostumbrando, sin embargo, por momentos sí que extraño un poco el hecho de no saber que los ojos de todos están posados en mí, o que sigan cada uno de mis pasos. De hecho, deberías tener algo de precaución.

—¿Por qué tanta precaución Mari?

—Has estado junto a mí últimamente, y Adrien no, en algún punto las personas comenzarán a murmurar, y ya sabes, la culpable siempre es la chica, aún si no saben nada de lo qué pasó en la pareja—Dije, bajado un poco mi cabeza.

—¡Hey, tranquila! No me importa lo que puedan decir de mí por estar cerca a ti, me da igual, solo quiero apoyarte—Dijo mientras me daba un suave toque en el hombro.

—Gracias, Ethan—Dije, y me dispuse a caminar.

Al cabo de un tiempo, llegamos al callejón y me destransformé.

—Ya está, vuelvo a ser yo Marinette, y ahora intentaré seguir con mi vida ¡Wuju!—Dije, claramente desanimada.

—¿Marinette, tienes planes para hoy? Quizás, salir te ayude en algo con ese ánimo que cargas.