Vi a Momo caminando, como en cámara lenta, hacia la otra esquina del salón.
—¡No, Momo unnie, espera!—grité de pronto, lo suficientemente fuerte para que las otras dos unnies dejaran de reír y me miraran extrañadas.
—¿Qué pasa? —preguntó Momo tras parar en seco.
—Nada—no pude advertirle que no debía hablar con aquella chica, que podía ser peligroso.
Vi como se hincaba frente a su escritorio y le hablaba, Son la miró, asintió y Momo sonrió. Luego vino caminando hacia mi.
—Dice que va a pensarlo, ojalá que se una, es una chica muy adorable.
—Unnie...—le dije en voz baja, para que se acercara a mí y poder hablarle en susurros—Ella es la chica que estaba buscando el otro día.
—Ah, es cierto que estabas buscando a alguien, pero nunca me dijiste para qué—se sentó en el asiento delante mio—¿Acaso te gusta? No te preocupes, no voy a quitártela, tengo novio.
—¿Sana no te contó por qué estábamos buscándola?—pregunté un poco sorprendida.
—No, solo dijo que necesitaba ayuda para encontrar a alguien—se encogió de hombros—Ella viene a detención desde el primer día—dijo refiriendose a Son.
—Es obvio—asentí con la cabeza—creo que es algún tipo de matona, líder de una pandilla, delincuente...o algo así.
—¿De qué hablas? Si lo único que hace es dibujar en su cuaderno y escuchar música mientras se queda ahí sentada la hora y media completa, creo que hoy es primera vez que hablamos.
—Pero debe haber algún motivo para que esté aquí en detención—me parecía la confirmación definitiva de que la chica era un peligro.
—Puede que sea porque no tiene club.
—¿Cómo sabes que no es de primer año? Los de primer año tiene tiempo para elegir aún, no tendría por qué estar en detención.
—No lo sé, solo estoy suponiendo. De verdad, Mina, no creo que Son sea como tú dices.
—¿Sabes cuál es su nombre completo?
—No, el profesor siempre la llama por su apellido, pero si quieres se lo pregunto—la chica ya estaba poniéndose de pie nuevamente, pero la jalé del brazo.
—Lo siento, unnie— dije apenada.
—Está bien, no le preguntaré, pero deberías hacerlo tú, y por favor deja de decirme unnie, prefiero que me digas solo Momo—caminó hacia las dos chicas que hablaban animadas—Déjame presentarte a Nayeon unnie y Jeongyeon.
El resto del periodo me lo pasé hablando con ellas, incluso la otra chica, Tzuyu, se unió a la conversación. Nayeon era una chica muy carismática, pero había reprobado el último curso, según ella para estar más tiempo con Jeongyeon, según Jeongyeon, era muy perezosa y faltaba demasiado a clases. Ambas eran de la otra escuela, y estaban en detención por ser ruidosas, los maestros las reprendían por conversar en voz alta y reír durante las clases, parecían buenas amigas. De la semana que llevábamos de clases, ellas habían estado cuatro días en detención por el mismo motivo. Momo nos contó que hoy tenía doble detención, por el tema del club y por haber sido descubierta comiendo en clases por tercera vez. Todas eran muy agradables, incluso la callada Tzuyu, sentí lástima de que todas estuvieran en la otra escuela, pues probablemente solo podríamos volver a cruzarnos en detención o en la entrada y salida de clases, pero Nayeon y Jeongyeon insistieron en que les diera mi número de teléfono para ir algún día a dar una vuelta por ahí después de clases.
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Malentendido (Michaeng)
Romance"Cuando me di cuenta de su presencia, y ella se percató de esto, levantó una mano y me dio un pulgar arriba, mientras decía algo que no llegué a escuchar, pero vi su boca moverse, luego me apuntó y después, el pulgar que estaba levantando, lo pasó l...