Las nueve cervezas estaban sobre la mesa de centro, todas estábamos alrededor de ellas, expectantes a la explicación que Nayeon nos estaba dando.
—Entonces, si yo empiezo y digo "marcas de ropa", la que está a mi derecha dice una marca, luego la que sigue y así hasta que una se equivoca o no se le ocurre alguna, ella como castigo tiene que tomar un buen sorbo de cerveza.
—¿Pueden ser marcas japonesas?—pregunté.
—Si sana y Momo confirman que existe, entonces si—Nayeon se sentó y dejó sobre la mesa el recipiente con papitas que traía de la cocina.
Dahyun era muy buena para este juego. Sana, a su lado, no perdió ninguna vez, pues Dahyun le susurraba respuestas todo el tiempo. Solo yo lo noté porque estaba sentada junto a ellas, pero lo dejé pasar porque era divertido cuando el juego daba muchas vueltas y nos poníamos nerviosas.
—Se ven más alegres, chicas—bromeó Nayeon, terminando el juego. La mayoría ya nos habíamos terminado una lata de cerveza, aunque Jeongyeon ya iba terminando su segunda lata, por mi parte ya había comenzado a marearme y no sabía si era bueno que siguiera bebiendo, podía caerme mal al estómago.
—Bien, las reglas del próximo juego son las siguientes—Nayeon dio la palabra a Jeongyeon.
—Ya que tenemos a la genio de las matemáticas, la señorita Momo Pitágoras, vamos a jugar un juego numérico. Vamos en orden hacia la derecha, diciendo números. Tres, seis y nueve, son los números que no pueden decir, cada vez que haya un numero de estos, aplauden, si uno de esos números aparece dos veces, como en el treinta y tres, aplauden dos veces. Quien se equivoque, bebe—explicó con rapidez.
—¿Alguna duda?—preguntó Nayeon.
—Muchas—respondió Momo—pero puedo aprender sobre la marcha—dijo, subiéndose las mangas para prepararse.
—Uno—empezó Jeongyeon.
—Dos—le siguió nayeon.
Jihyo aplaudió.
—Cuatro—dije.
—¡Cinco! —exclamó Dahyun, mientras le daba un codazo a Sana, la cual aplaudió.
—Siete—Tzuyu dijo de inmediato.
—¿Ocho?—preguntó Chae.
Todas miramos a Momo, que se veía nerviosa.
—Nue—no alcanzó a terminar y aplaudió con torpeza. Nos reímos de ella y la obligamos a beber, pues consideramos que había perdido.
Seguimos jugando así un rato, llegamos hasta el numero cuarenta y tres, mas allá no logramos llegar, pero fue divertido, en especial los números del treinta al treinta y nueve, que fueron solo aplausos.
Terminé mi segunda lata de cerveza, pero entonces Nayeon comenzó a sacar, de la otra bolsa que traía, más latas. Ya había comenzado a sentirme mal del estómago, no sé qué cara tenía, pero frente a mí y entre todo el barullo que se creaba por mis amigas alcoholizadas, que ya no hablaban, si no que gritaban, Chaeyoung me miraba con preocupación.
—Necesito que para este juego todas tengan una lata llena—dijo la mayor, entregándonos las latas—Por turnos diremos una frase, empezando por "Yo nunca", por ejemplo "Yo nunca me he comido un yogurt caducado", las personas que lo hayan hecho tendrán que beber, es muy simple.
—Entendido, capitán—Jihyo puso una mano en forma de saludo militar, mientras se bebía lo que le quedaba de cerveza, para abrir otra.
—Bien, yo empiezo—dijo Jeongyeon—Yo nunca me he dormido en clases. Todas, menos Dahyun y Jihyo, bebieron, incluida yo, no podía negarlo.
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Malentendido (Michaeng)
Romance"Cuando me di cuenta de su presencia, y ella se percató de esto, levantó una mano y me dio un pulgar arriba, mientras decía algo que no llegué a escuchar, pero vi su boca moverse, luego me apuntó y después, el pulgar que estaba levantando, lo pasó l...