Relatividad General

CXVI. Sobre la base de la geometría plana euclidiana

—¿Qué estás leyendo?

Taehyung hizo una pausa, dejó caer el dedo sobre la palabra en la que se había demorado y ofreció al Sr. Kim una sutil sonrisa.

—Far From the Madding Crowd. ¿Lo leíste en la escuela?

—¿Qué significa "madding"? —preguntó el Sr. Kim, ladeando la cabeza. Se tiró contra el respaldo de su sofá, justo al lado de donde Taehyung se había acurrucado con su taza y la mullida manta azul y roja que el Sr. Kim mantenía desordenadamente colgada sobre los cojines. —Mira, yo era un nerd de ciencias físicas, ¿okay? Utilizaba los libros como pisapapeles y para asegurarme de que el láser apuntara lo suficientemente alto como para alinearse correctamente con mi lente.

—Es muy parecido a como suena. Enloquecedor. Todo un caos. De todas formas, ya casi he terminado, si quieres podemos hacer algo.

—No importa. Acabo de terminar de calificar. Podríamos quedarnos en casa.

—Seguro.

—Me gusta verte en mi sofá —suspiró el señor Kim, observando a Taehyung con un cierto anhelo que decía que quería tocar pero no se atrevía.

Incapaz de resistirse, Taehyung le cogió la nuca para incitarlo. El Sr. Kim se acercó con avidez y apretaron sus frentes, y a pesar de todas las cosas que aún no habían hecho o hablado, Taehyung sintió en esos momentos como si todo fuera a estar bien. El Sr. Kim estaba loco; también era un tesoro.

—¿Qué tipo de libro es? —murmuró el Sr. Kim contra su mejilla.

—Un poco trágico. Un amor que tarda demasiado en culminar.

—Huh. ¿Es acaso una indirecta?.

—En realidad no —le dijo Taehyung, y luego durante el resto de la semana no pudo dejar de pensar en lo que el señor Kim insinuaba.