XII. Confirmación experimental de la teoría de la relatividad

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El Dr

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El Dr. Choi echó la cabeza hacia atrás y se rió.

—Esto no es gracioso —dijo Taehyung con pesar, pero esto sólo hizo que su profesor se riera aún más. Suspirando y dejándose caer en la silla frente al escritorio del Dr. Choi, Taehyung se resignó a ser objeto de burla durante un minuto más. Sabía que la histeria se le pasaría pronto. Aunque pareciera un extraño y loco, el profesor de Literatura Europea favorito de Taehyung siempre lo había apoyado en sus crisis.

Como de costumbre, después de un momento el Dr. Choi se secó los ojos y se calmó.

—Perdóname Taehyung, pero no veo que tenga usted algún problema.

Taehyung se frotó la frente. Deseaba que ese sueño desapareciera: todo lo que podía imaginar eran los ojos brillantes como piedras preciosas del Sr. Kim fijos en él entre las estrellas. El recuerdo de su piel, cálida como el espacio jamás podría ser.

Mierda. Se estaba volviendo loco.

—Taehyung —murmuró el Dr. Choi, acomodándose en su silla —Estoy hablando muy en serio. No hay nada malo en sentirse atraído por alguien. Y mucho menos por el Sr. Kim. Ese hombre tiene un culo como el David de Miguel Ángel, tú...

—Oh Dios, por favor no digas eso. Sé que lo tiene —gimió Taehyung con desesperación.

—Fantasear un poco nunca hace daño a nadie.

Taehyung no señaló que sí, que lo había hecho. Y que eso lo estaba matando.

—Sí, lo sé. Y he estado fantaseando, quiero decir. Durante, eh, ya sabes, durante tal vez un año.

El Dr. Choi se sobresaltó.

—¡Un año!

—Pero nunca lo había conocido, en realidad, y ahora que lo he hecho he tenido sueños extraños, hay algo que no cuadra. De hecho, esta mañana me acosté en la cama y... y yo —y aquí Taehyung vaciló, avergonzado pero incapaz de mentir —Traté de imaginar cómo podría... preguntarle. Si se lo pidiera. Si quisiera invitarle a salir. ¿No es eso lo más infantil...?

—Shh —dijo el Dr. Choi, con una solemnidad en su cara que Taehyung no recordaba haber visto antes. Levantó una mano. —No digas más. Ahora lo entiendo. Estamos ante una crisis muy grave.

De alguna manera, eso no hizo que Taehyung se sintiera mejor, todo lo contrario.

Y entonces el Dr. Choi sacó una botella de vino medio vacía y todo fue cuesta abajo a partir de ahí. Sobre todo porque después de dos copas, Taehyung era un completo desastre, y después de tres, el señor Kim llamó a la puerta.

Porque al universo le gustaba conspirar en contra de Kim Taehyung.

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