♡Capítulo 19♡

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Las amigas de Meztli rápidamente fueron a auxiliarla, verificando que estuviera bien

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Las amigas de Meztli rápidamente fueron a auxiliarla, verificando que estuviera bien. Todo había pasado tan rápido que no les dio chanza de reaccionar a tiempo.

-¡Meztli! ¿Estás bien?-pregunto con preocupación la azabache, buscando con la mirada alguna herida en su amiga.

Meztli estaba en shock, ella estaba preparada para recibir ese golpe, sin embargo nunca llego. Al abrir los ojos pudo sentir cómo había sido jalada hacia atrás por sus amigas cayendo al piso, mientras un chico se interpuso entre ella y Axel, siendo él el que recibiera el golpe en su rostro. Todo había sido tan rápido que no se había dado cuenta de cuando ese chico había llegado. Nunca imagino que alguien ajeno a la situación se metería para defenderla, pero ahí estaba él, defendiéndola sin siquiera conocerla. ¿Acaso todavía hay gente buena?

El extraño chico limpio la poca sangre que escurría de su labio roto con la manga de su chaqueta de mezclilla, sonriendo como si hubiera sido lo mejor que haya recibido en la vida. Por lo que hizo enfurecer aún más al alfa frente a él, no le gustaba cuando la gente se metía en sus asuntos.

-¿Qué diablos crees que haces?-pregunto cabreado-Este no es tu asunto idiota.

-¿No crees que es muy bajo hasta para ti querer golpear a una mujer, Axel?-sonrió con burla el chico de ojos azulados.

-No ocupo que alguien como tú venga a reclamarme lo que debo o no hacer Alejandro.- escupió con cólera.

Axel se acercó amenazante al contrario dejando unos pocos centímetros de distancia entre ambos, tratando de intimidarlo. El ojiazul no se inmuto por la cercanía del alfa de tez morena, su aroma no hacia ningún efecto en él y tampoco su presencia fuerte, no le tenía miedo. Pues el ojiazul era un poco más alto que este por unos ocho centímetros, a lo máximo, y de cuerpo igual de musculoso que el contrario. Ambos eran atletas, uno de fútbol americano y el otro de béisbol. No era lo mismo pero tenían la misma resistencia y agilidad, cada quien tenía lo suyo para ganar en una pelea.

Julián vio desde su lugar a ambos chicos matándose con las miradas. Él estaba a punto de intervenir para detener a Axel, pero aquel muchacho se le había adelantado. Estaba sorprendido de ver a Alejandro meterse en una pelea que no le correspondía y mucho menos por alguien que no conocía. Pues si bien, lo poco que conocía de aquel pelirrojo de ojos azules era que él jamás se involucraba en los problemas de nadie, no le gustaba perder el tiempo en eso. Era más alguien que se valía por sí mismo, no le importaba nadie que no fuera el mismo. ¿Entonces porque meterse ahora?

Alejandro era muy bien conocido en la escuela también por ser el capitán de béisbol. Era amado por las chicas, siendo el segundo chico más idolatrado y popular de la institución, después de Julián por supuesto. Eran tan similares y a la vez tan diferentes. Alejandro era más caballeroso y sabia tratar mejor a sus acompañantes, les daba su lugar al igual que respeto. Se cercioraba de que se la pasaran bien junto a él sin importar que la mayoría de las veces era por solo una noche.

Una Historia Muy Cliché- OmegaverseDonde viven las historias. Descúbrelo ahora