Iba decidido, no había vuelta atrás. Julián Seung Kim Chávez, el alfa más codiciado de toda la escuela, iba en camino a tragarse su orgullo. Se odiaría así mismo pero la situación lo requiere, su equipo lo necesita. El alfa orgulloso estaba dispuesto a hacer todo con tal de jugar.
Le rogaría a la chica nerd por su perdón, pediría por misericordia. Sin embargo, primero la tendría que encontrar.
-¿Dónde diablos estará?-dijo en voz baja mientras caminaba por los pasillos del instituto a paso veloz.
Todos lo volteaban a ver con confusión, pero eso poco le importaba al alfa. Ocupaba encontrar a aquella chica antes de que le fuera a decir al profesor de física todo lo sucedido.
>>Maldita sea<< el alfa maldijo internamente, estaba desesperado pues el tiempo se le agotaba para antes de que empezaran las clases. No había llegado temprano a la escuela en vano para no lograr su acomedido. Jamás se había levantado tan temprano para ir a un lugar que no fuera entrenamiento. >>Juro que me disculpare y luego la matare por hacerme perder tiempo<<
Estaba a punto de perder la cordura y mejor rendirse de una vez pero a lo lejos pudo divisar una caballera castaña. >> ¡BINGO!<< Al fin la había encontrado. El alfa sonrió internamente por al fin haber encontrado a la chica, pero esa felicidad se esfumo cuando vio hacia donde se dirigía.
-¡Mierda! Tengo que alcanzarla o soy hombre muerto.
El alfa corrió lo más rápido que pudo empujando a todos a su alrededor e ignorando a aquellas chicas buscando su atención. Por alguna maldita razón, el pasillo se encontraba lleno de estudiantes. Siguió con su camino sin parar, estaba por alcanzarla pero fue muy tarde. Ella había entrado a la clase.
-Demonios, ¿ahora qué hago? Si entro a la clase y la interrumpo se miraría demasiado raro. Tampoco puedo entrar y decir que ocupo hablar con el maestro porque eso sería aún más raro.- El chico se jalaba sus cabellos con frustración y notable nerviosismo.- A la fregada, lo tengo que hacer o soy hombre muerto.
Entro azotando la puerta sin haberlo planeado llamando la atención de ambas personas. Sin embargo, lo que menos se espero era ver a aquella omega en pleno acto con un alfa en el salón de clases. ¿Acaso se había equivocado de clase y estuvo siguiendo a otra chica?
-¡Ahhhh!-se escuchó el grito de aquella chica intentando abrocharse la blusa muriendo de la vergüenza.
-¡Oh dios! ¡Lo siento mucho! ¡No vi nada!-dijo saliendo al instante del aula con el corazón acelerado. Jamás se había sentido tan avergonzado en toda su vida por presenciar una escena tan comprometedora, hasta ahora. El que el fuera participe en tales escenas no significaba que se sentía cómodo viendo a otros en ese tipo de situaciones.
-¿Qué haces ahí? ¿Te pasa algo?- le pregunta una voz conocida, sintiéndose aliviado al confirmar que era justo a la chica que estaba buscando.
-Al fin te encontré
-¿Eh? ¿Me andabas buscando?-pregunto incrédula la chica, pues escuchar eso no se lo esperaba.
-Si, a ti te estaba buscando. Llevo casi una hora caminando por toda la escuela y por ese hecho me topé con una escena para nada agradable- dijo el chico con un tono de desagrado.
-Bueno, aquí estoy. ¿Qué quieres?-se cruzó de brazos enarcando una ceja en la espera de lo que fuera que el alfa tuviera que decirle.
-Pues...pues ya no tiene sentido. Yo me estaba imaginando que iría a interrumpirte cuando estuvieras hablando con el maestro, pero ya le quitaste lo interesante.-dijo el alfa con un leve mohín sin darse cuenta, lo cual le pareció algo gracioso de ver a la castaña. Tierno.
>>Espera, ¿Qué? ¿Tierno? ¿él? ¡Ni al caso! ¡En qué diablos estoy pensando!<< la chica se sorprendió por lo que había dicho en su cabeza provocando que su lobo se alborotara de una manera... ¿positiva?...espera, su lobo estaba ¿reaccionando?
Estaba tan sumida en sus pensamientos que no se dio cuenta que estaba siendo observada por un alfa confundido por la cara de disgusto que sostenía mirando a la nada.
-¿Estas bien?-pregunto algo confudido pues la chica le daba algo de miedo por el semblante que se estaba cargando. Parecía como si estuviera peleando con sus demonios mentales. Si tan solo supiera que él era el causante de esa guerra mental en la chica.
-¿Eh? Oh si perdón. R-recordé que tengo que hacer algo.-dijo un tanto nerviosa evitando toparse con aquella mirada tan penetrante del chico.- ¿Ya no tienes nada que decirme, verdad?
-Bue...
-Okey, nos vemos hoy a la misma hora de siempre y en el lugar habitual-le interrumpió sin darle tiempo de explicarse por la razón en que la busco realmente. Y sin más se dio media vuelta y se fue casi corriendo hacia su primera clase. Se sentía que moría de la vergüenza, podía sentir toda su cara roja.
-¿Okey?-eso había desconcertado al chico. Jamás la había visto actuar así, él sabía que la chica era rara, pero no creía que tanto. En fin, su plan no había salido comolo había planeado, pero al menos soluciono el problema de alguna manera. No setuvo que disculpar y menos darle explicaciones por su falta, y lo más importante, no tuvo que rogarle para que le diera otra oportunidad.
Una disculpa por desaparecer, la escuela si que toma su tiempo. Disfruten de la lectura:)
ESTÁS LEYENDO
Una Historia Muy Cliché- Omegaverse
RomanceÉl, es el alfa dominante más rudo y popular de la escuela. Capitán del equipo de futbol americano, y considerado el número uno en todo menos en el estudio. Ella, una simple omega como cualquier otra tratando de sobrevivir la preparatoria. Reservada...