No supo cuánto tiempo paso desde que se quedó dormida en aquel sillón cómodo, solo podía confirmar que tuvo una gran siesta sin duda.
—Vaya, hasta que despiertas.
Meztli se sobresaltó en su lugar al escuchar una voz muy gruesa frente a ella, y no le tranquilizo para nada darse cuenta del dueño de ella.
— ¿J-Julián?—titubeo un poco al verlo recargado en uno de los postes de madera con una postura relajada y desinteresada mientras tomaba de su margarita. — ¿Qué haces aquí?
—Pues lo mismo que tú, supongo. —se encogió de hombros, dándole otro sorbo a su margarita.
Meztli asintió levemente con algo de pena de que la haya cachado dormida, solo esperaba no haberse visto muy mal, eso sí sería muy vergonzoso. Mantuvo su vista en sus manos que estaban enredadas con nerviosismo. No lo quería voltear a ver ahora que recordaba que estaba vistiendo ropa muy diferente a lo que ella habituaba a usar.
—Por supuesto, eso fue algo muy obvio.
—Si...
Un silencio incomodo se empezaba a formar entre ambos jóvenes, ninguno sabía qué clase de conversación iniciar. Hablar de la escuela o tutorías no era una opción y ahora mucho menos que estaban temporalmente canceladas.
—Por un momento no te había reconocido.—volvió a hablar el alfa frente a ella, haciendo que esta se tensara en su asiento.— Para ser sinceros, jamás creí que llegaría a verte en un evento así y mucho menos fuera de esa ropa que siempre usas.
—Sí, bueno, no es como si esto era parte de mi plan tampoco. —vio su vestimenta con incomodes para luego posar su vista en aquel chico. — Tampoco me imagine verte aquí.
—Créeme que tampoco era parte de mi plan asistir a este evento, pero el idiota de Noah me obligo a venir. —bufó con molestia al recordar todas aquellas veces que el azabache le estuvo rogando a que lo acompañara. Hubiera sido fácil ignorarlo si no fuera que ese chico era muy terco y jamás aceptaba un no como respuesta. —Se la pasó toda esta semana suplicándome.
—Vaya, suena muy intenso.
—Ese es Noah por si no lo sabias. —bromeó.
La omega rio levemente, sintiéndose más cómoda con la presencia del castaño. Lo cual ahora viéndolo con detenimiento pudo apreciar mejor su vestimenta. Julián lucía un smoking completamente negro abierto por enfrente, dejando ver la camiseta blanca de botones, acompañada de una corbata negra también. Zapatos de salir del mismo color que su traje. Todo en él lucia simplemente impecable y elegante, algo que jamás creyó ver en ese alfa quien siempre usaba su uniforme desalineado.
Meztli podía sentir su corazón detenerse por más que inspeccionaba al chico. Por más que quisiera no podía negar que Julián se miraba demasiado atractivo en su traje, se adhería perfectamente a su musculoso cuerpo. Y sin olvidar su rostro completamente limpio. No había ninguna señal de vello facial. Su cabello estaba peinado hacia atrás en una pequeña coleta, dejando caer unos pocos mechones rebeldes en su frente. Sus piercing de la oreja sobresalían aún más por estar despejadas completamente.
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Una Historia Muy Cliché- Omegaverse
RomantizmÉl, es el alfa dominante más rudo y popular de la escuela. Capitán del equipo de futbol americano, y considerado el número uno en todo menos en el estudio. Ella, una simple omega como cualquier otra tratando de sobrevivir la preparatoria. Reservada...