- Agua -

8. La verdad

Bogotá.

Abril, 2021.

Juan Pablo Villamil.

Susana me mira por encima de la tapa de su computador, pero finjo que no la veo.

Está revisando la edición que su equipo le hizo al videoclip de su segundo sencillo, y como una buena Isaza, todo le parece mal, aunque es una mujer hermosa con una voz angelical, así que es muy difícil que algo acerca de un video de ella cantando no sea perfecto.

Estoy sentado en el piso de la sala de su casa acariciando la cabeza de Malta mientras oigo en mis audífonos los arreglos finales que Isaza hizo para la producción de una de las últimas canciones en las que estuvimos trabajando.

- ¿No deberían estar más arriba los bajos? – Le pregunto. Isaza frunce el ceño

- Quería marcar más las percusiones

- Está bien. Me gusta – Asiento – Y yo dejaría el ladrido de Malta al principio

- ¿De verdad? Era un chiste – Se ríe Isaza

- No, déjelo. Malta también es de Morat

Ante el sonido de su nombre, ella levanta la cabeza y me lame el mentón.

Me encanta esta criatura.

El celular de Susi suena.

Me siento erguido.

- Es ella – Anuncia, mientras se baja del sofá y se sienta a mi lado

Malta también se levanta y se sienta bien derecha, como si supiera que algo importante está pasando.

Susana activa el altavoz, me da una mirada divertida y contesta.

- Hola, Cherry

- Déjame oírla entera – Le responde una voz del otro lado.

Para ser precios, es la voz de Pastelito.

La voz que me dijo que mi figura de banjo más querida era mala.

La que me dijo que era su favorito de la banda.

La que me agradeció por sostenerla luego de darme ese beso inolvidable.

La que me pidió mi número, y le dije que no.

- Tendrías que firmar como 500 acuerdos de confidencialidad – Dice Susi con una risita

- Los firmaré – Acepta Pastelito – Susana, es una canción increíble. Es....es....Nunca me quedo sin palabras, pero es demasiado. Tienes un talento enorme y quiero besar las manos de tu guitarrista principal

- Ese fue mi hermano – Dice Susi con una sonrisa, mientras levanta la mirada hacia Isaza

- Estoy enamorada de ese hombre – Reflexiona Pastelito. Susi se ríe

- ¿Sí? Me pareció ver en tu blog que tu favorito era Villa

- Nah – Dice Pastelito distraídamente

Susi me mira de reojo.

- Me gustó mucho la suavidad de la producción – Comenta Pastelito de pasada - ¿Por qué decidieron grabarla sin percusión?

Susi levanta la mirada hacia Isaza y le ofrece el celular.

Él le da una mirada medio de pánico mientras lo recibe.