usque in finem. (Eddie Munson)

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Domingo, 01:30pm~~~

—Está bien Jimmy, puedo hacerlo sola—

—Eres demasiado pequeña. Eddie!! Ven aquí—

—Voy!!—

Ema se encontraba en la tienda de música intentando colgar un póster de una banda pero Jimmy vio que necesitaba ayuda y él debía irse. Ese día pero más temprano, Eddie insistió en ir con ella al trabajo porque Wayne no estaría y no quería quedarse solo, Ema aceptó y fueron juntos al centro.

—Tengo que irme, podrías ayudar a Morgan? Hay que poner algunos posters nuevos.—

—Si claro.— Munson se acercó con una sonrisa a la chica y estiró la mano para que le pasara las cosas, ella rodó los ojos y se los paso. En lo que el castaño hacía lo que le pidieron, Ema volvió a la caja junto a Jimmy

--Y como van las cosas con el? -- pregunto el mayor.

--Pues muy bien, es genial--

--Entonces son novios?--

--No, aun es complicado--

--Entiendo. Bueno debo salir.--

—Ya ve, yo seguiré. Nos vemos el viernes— El jefe de la chica se despidió y se fue. Unos minutos después, Eddie fue con ella al mesón, abrazándola por la espalda, depositando pequeños besos en su cabeza.

—Como te sientes nena?—

—Me duelen las piernas—

—Lo siento. No debí ser tan rudo.— dijo apenado escondiendo su cara en el cuello de la chica.

—No te disculpes, Que me duela no significa que no me haya gustado— Ema se volteo hacia él y lo abrazó sonriendo. La noche anterior después de ir a Morsun, fueron a casa de la chica, las cosas se acaloraron y terminaron teniendo una noche apasionada y divertida. La pelinegra había quedado algo adolorida pero valió totalmente la pena, estaba feliz y le encantaba que Eddie fuera tan preocupado y gentil la mayoría de veces pero también le gustaba y la volvía loca cuando era sexy y atrevido.

--Quieres comer algo?--Pregunto separandose de el

--Uhh si--

--Unas papas?--El castaño asintio y Ema tomo su billetera-- Ire a comprar cruzando la calle, pondre el cartel de cerrado un momento.

--Esta bien nena. Oh, puedes traerme un paquete de cigarrillos?--

--Si cariño-- La pelinegra salio de la tienda y cruzo la calle hacia el almacen, tomo 2 refrescos, una bolsa de papas fritas grande y se acerco a la caja para pagar encontrandose con la misma señora de la vez anterior.--Buenas tardes, llevare esto y unos Malboro Rojos por favor.

La señora no le dijo nada y paso las cosas, a Morgan le causaba gracia la cara de aquella mujer, era una especie de desagrado y temor, pero no se sentia ofendida.

--Son 30-- Ema le paso el dinero y tomo las cosas

--Gracias, que tenga buen dia-- Dijo con una sonrisa antes de salir de la tienda. Iba a cruzar la calle cuando un tipo casi la atropella-- Fijate por donde vas Imbecil!!-- Grito levantando el dedo medio, llego a la tienda con cara larga y dejo las cosas debajo del meson.