"No que no tronabas pistolita".

Capítulo 02

Mientras tanto, con una cojera y cadenas, un hombre, no, Su Majestad, el futuro Emperador, Magnus DiCloud, me besaba los pies y contenía las lágrimas.

Y Magnus está haciendo esto delante de mí, así que estoy...

-No es cierto, ¿verdad?

Levanté la mano y miré a mi alrededor.
Las manos sin nada de grasa son blancas y suaves, esta no es mi mano y nadie la vería así.

En un instante, todo tipo de pensamientos pasaron por mi cabeza junto con el correo electrónico.

«... X... Pie...»

No, alguien me pidió que revisara esto yo misma. Es demasiado directo. No quería este tipo de 'directamente'.

... ¿Qué demonios voy a hacer con esto?

-Lina... Por favor... Tengo miedo.

Nunca he tenido un contratiempo así.
Magnus no puede sujetar mi pierna, no...

Tal vez las piernas de Ilyana no se podían agarrar, pero puso las uñas y arañó la alfombra del suelo.

Magnus se tragó las lágrimas con el miedo impreso.

Su rostro, que parecía haber estado plagado de pesadillas toda la noche, estaba blanco y sin sangre, sus dedos temblorosos parecían doloridos por el miedo.

El problema es que también estoy muy avergonzada por esta situación.

«...Ah».

Espera, ¿no es esto demasiado? Me estás mostrando un epílogo. Estoy haciendo un epílogo. No puede ser.
¿Es un sueño?

Ahora que lo pienso, creo que me fui a la cama justo después de escribir una respuesta al correo electrónico.

«Debe ser un sueño».

Esta tontería no puede ocurrir si no es un sueño.

-Eso...

Abrí la boca y la volví a cerrar debido a una voz extraña que salía de mi boca.

Sin embargo, Magnus, que estaba agachado a cuatro patas, reclinó la cabeza incluso con mi pequeña voz.

Los ojos dorados y turbios se llenaron de agua.

No es mi voz la que habló ahora. Era claramente la voz de Ilyana Glaine.

¡Claro que sí! Porque este cuerpo se parece a Ilyana Glaine.

Una voz única que es neutra y que parece rayar la garganta.

Ilyana Glaine tenía un complejo en su voz.

Así que siempre elevaba la voz al tono de soprano y hablaba fuerte.

En el mejor de los casos, el Marqués, sus padres, su confidente más cercano, y Magnus, son quienes saben que tiene esta voz.

-Lina... Por favor...

Como no dije más, Magnus DiCloud mató su voz de miedo al máximo y me besó de nuevo en el pie.

Sus labios, apretados contra los pies, eran fríos como el hielo, y parecía bastante asustado por su sueño del día anterior.

Ilyana siempre hacía que Magnus tuviese a propósito, terribles pesadillas antes de venir. Esperaba que no pensara en él mismo y se aferre a ella.

Magnus no dejaba de mirarme mientras yo permanecía rígida. Y gemía como si se preguntara si debía volver a bajar los labios.

Parece que no ha entendido la razón por la que no hablo con él.