"No que no tronabas pistolita".

Capítulo 14

En los viejos tiempos, la suerte inútil estaba del lado bueno, pero esta vez, creo que es bueno que no pueda estar solo con esa persona.

No sé por qué, pero lo que sea.

Subamos y descansemos.

A medida que mis emociones disminuyeron, pude respirar. Suspiré brevemente y entré en la habitación.

Ahora que lo pienso, he estado ocupada con otras cosas, así que no he podido ver bien la habitación de Ilyana Glaine.

«¿No existe tal cosa como un diario oculto?»

Me acerqué al escritorio, me agaché y abrí los cajones uno por uno. Aunque este es el lugar donde abrí todo el camino para sacar la botella de tinta el otro día.

«Por lo general, hay un cajón secreto más en este lado».

Solo lo he visto en dibujos animados. En caso de que no lo supiera, metí la mano dentro del cajón y busqué a tientas la tapa. Mi barbilla y mis dedos quedaron atrapados en extraños agujeros.

Con los ojos bien abiertos, metí el dedo en el agujero y moví la mano.

¡Clic!

Algo cayó en la palma de mi mano. Con cuidado lo tomé y lo saqué del cajón.

«¿Diario?»

Lo que tenía en la mano era un pequeño cuaderno de cuero marrón. Es una libreta muy pequeña, apenas del tamaño de la palma de la mano.

Era demasiado pequeño para llamarlo diario y parecía viejo. Parece que no se ha sacado en mucho tiempo, así que tenía bastante polvo.

Me senté en mi escritorio, le quité el polvo y abrí mi cuaderno. Aunque era la primera vez que veía la letra rizada, me vino a la mente como una interpretación natural con solo mirarla.

-Se dice que si puedes hablar un idioma extranjero con fluidez, puedes entenderlo de inmediato.

No sabía que podía sentir este tipo de sentimiento en el cuerpo de otra persona. Por supuesto, para Ilyana Glaine, esta es su lengua materna.

[Calendario Imperial 21 de marzo de 920, 7 horas. 32.]

¿Qué? Pensé que era un diario, pero solo estaba escrita la fecha. Obviamente, ahora es el año 930 del calendario imperial, así que fue hace 10 años. Hay una razón por la cual el cuaderno parecía muy viejo.

Nada estaba escrito en él excepto las siete horas y el número 32. El diario no registró lo que había sucedido ese día.

«¿No es un diario, sino un bloc de notas donde tomas notas?»

Pensé y pasé al siguiente capítulo. El papel viejo está a punto de rasgarse o desmoronarse si lo sujetaba con un poco de fuerza. Había muchos lugares donde el color era amarillo.

[3 de septiembre de 920 por el Año Imperial. 29 horas 40.]

[4 de febrero de 921 en el Año Imperial. 11 horas. 27.]

[2 de abril de 921 en el Año Imperial. 9 horas. 11.]

No importa cuántas veces volteé el papel, la mayoría de ellos eran memorandos de este tipo. No puedo tener una idea de lo que tomé notas, y la fecha está casi al nivel de una ráfaga. Me encogí de hombros, frunciendo el entrecejo, y rápidamente volteé el cuaderno.

[5 de noviembre de 927 en el Año Imperial. Encontré una bestia perdida.]

[6 de noviembre de 927 por el Año Imperial. La bestia era un dragón dorado.]