vi. tan solo para poder acariciar tu rostro

5.9K 654 82
                                    











𝐀𝐂𝐓 𝐓𝐇𝐑𝐄𝐄. 𝐂𝐇𝐀𝐏𝐓𝐄𝐑 𝐕𝐈
════════════════════
𝐓𝐀𝐍 𝐒𝐎𝐋𝐎 𝐏𝐀𝐑𝐀 𝐏𝐎𝐃𝐄𝐑
𝐀𝐂𝐀𝐑𝐈𝐂𝐈𝐀𝐑 𝐓𝐔 𝐑𝐎𝐒𝐓𝐑𝐎








—Hola, Tey.

Neteyam simplemente no podía creer que ella en serio estuviera ahí. Justo frente a él. Saludándolo y regalándole la sonrisa más hermosa que este mundo podía tener.

Contiene sus ganas de llorar gracias a la felicidad y corre hacia ella, tomándola en sus brazos para confirmar que en serio estuviera ahí. La chica ríe y lo abraza de vuelta, sintiendo un alivio al recordar lo mucho que amaba el contacto de sus cuerpos.

—También te extrañé—. Comenta en un susurro al notar los brazos del hombre apretarla más contra él.

Como si tuviera miedo de volverla a perder.

Neteyam se separa levemente de ella, conectando sus ojos al segundo. Dayami puede admirar la pluma que le había regalado colgaba detrás de su oreja, haciendo que sonría tiernamente. Él hace lo mismo y la toma de la mejilla para dejar suaves caricias en esta.

—¿Eres real?— Su pregunta hace que suelte una carcajada corta para luego cambiar su rostro a uno enternecido.

Por Eywa, amaba que lo mirara así.

—Te prometí que vendría a visitarte, ¿no?— Contesta posando su mano sobre la de Neteyam.

Mientras ambos tenían su momento de reencuentro, el resto de los Metkayina comenzaban a alejarse del lugar, ya acostumbrados a ver a alguien del bosque. Solo quedaban ahí los hermanos Sully junto a Aonung y Tsireya, quienes estaban intrigados con lo que estaba sucediendo

Lo único en lo que pudo pensar el mayor de los Metkayina fue en lo hermosa que era la chica nueva. No necesitaba preguntar para saber que a diferencia de los Sully, ella no era mestiza. Y eso le gustaba.

—¿Quién es ella?— Pregunta mirando a Lo'ak, esperando una respuesta prometedora.

—Dayami—. Contesta sin darle mucho importancia al asunto. Tan solo estaba contento de ver a su hermano feliz. —Es la novia de Neteyam.

Esto causó una mueca en el mayor y una sonrisa en su hermana menor. Lo'ak le había comentado a Tsireya sobre Dayami, por lo que le emocionaba saber que ella y Neteyam se había reunido de nuevo.

—¡Tienes que conocer la aldea!— Tuk no aguanta más la ganas y corre hacia la mujer, tomándola de la mano y jalando para que pudiera seguirla.

Gracias a su acción, interrumpe el momento entre los dos, causando una risa en ella pero un suspiro frustrado por parte de él.

—¡Tuk!— Llama su atención, mostrándose enojado por lo que acababa de hacer.

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
𝗜𝗥𝗜𝗦, neteyamDonde viven las historias. Descúbrelo ahora