xxii. esta noche, mamá dice que no te ves feliz

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𝐀𝐂𝐓 𝐓𝐇𝐑𝐄𝐄. 𝐂𝐇𝐀𝐏𝐓𝐄𝐑 𝐗𝐗𝐈𝐈
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𝐄𝐒𝐓𝐀 𝐍𝐎𝐂𝐇𝐄, 𝐌𝐀𝐌𝐀́ 𝐃𝐈𝐂𝐄
𝐐𝐔𝐄 𝐍𝐎 𝐓𝐄 𝐕𝐄𝐒 𝐅𝐄𝐋𝐈𝐙








Sentado en el fondo de la tienda que se encontraba completamente sola, el hombre admira en silencio el atardecer que comenzaba a formarse frente a él.

Lo único en lo que podía pensar era en Dayami.

Se había comportado como un completo idiota y merecía lo que le había dicho. Nunca pensó que iba a ser posible escuchar esas palabras por parte de ella, y ahora que lo había hecho, no podía evitar sentirse como una horrible persona.

Si fue capaz de tratar así al amor de su vida, entonces era capaz de cualquier cosa. Le es imposible no sentirse indispuesto al pensar en eso. Y creer que su relación con Dayami podía terminar, simplemente hacía que quisiera morir en ese mismo instante.

No podía vivir sin ella.

Sus pensamientos se ven interrumpidos al ver a Lo'ak entrar al lugar con un rostro molesto. Era claro que esto iba a pasar. Dayami y Lo'ak se habían convertido en muy buenos amigos, esto significaba que se contaban todo.

—¿Qué mierda hiciste?— Le pregunta sentándose frente a él, tapando con su cuerpo el paisaje de antes. —Ni siquiera me habla—. Neteyam se sorprende un poco al escucharlo, creyó que llegaría a darle un sermón por todo esto. Lo mira durante unos segundos, pensando bien en cómo iba a decirle las cosas.

—Lo arruiné—. Comienza intentando contener las ganas de llorar. No podía dejar que su hermano lo viera así. —Lo arruiné todo—. Lo'ak lo mira levantando una ceja, era obvio que lo había arruinado, necesitaba saber cómo. —Fao rompió el collar que le regalé.

—¿El que siempre usaba?— Asiente levemente para contestar. —¿Y qué hiciste?

—Nada—. Suelta en voz baja apoyando su cabeza en la pared detrás de él. —No hice absolutamente nada. Fui un idiota con ella—. A pesar de que se sentía bien desahogarse con alguien, odiaba que ese fuera su hermano. —No entendí lo importante que era para ella y le hice creer que sus sentimientos eran estúpidos.

—¿Por qué no le dijiste nada a Fao?

Recordando bien todo, no podía entender porqué había actuado así. No tenía sentido. Él no era de esa manera. Nunca trataría a Dayami así de mal solo porque si.

—Yo... no creí que lo hubiera hecho apropósito—. Se gana una mirada incrédula por parte de su hermano menor. —Ya lo sé, fui un completo skxáwng—. Sus manos suben a su rostro, la culpa comiéndolo por dentro. —Cuando la vi con esa maldita sonrisa fue cuando me di cuenta que lo había planeado, pero ya no podía hacer nada—. Su mirada se dirige a Lo'ak buscando alguna respuesta que le pudiera hacer sentir mejor en esos momentos.

Aunque ahora, lo único que podía hacerle sentir mejor era que Dayami lo perdonara.

—Definitivamente eres más estúpido de lo que pensé—. Ríe amargamente causando un rostro confundido en el mayor. —Neteyam, Fao lleva intentando meterse en su relación desde que llegaste aquí—. Dice lo obvio mientras lo ve rodar los ojos.

𝗜𝗥𝗜𝗦, neteyamDonde viven las historias. Descúbrelo ahora