Menstruation [KookTae]

08

Taehyung entró en pánico y Jungkook tuvo que guardar su grito afeminado.

No agregó nada, Jungkook guardó silencio y le dio una mirada cálida. Prefirió no agregar nada de golpe, Tae había soltado aquello en un impulso, más que por real deseo. Confesarse no era tarea fácil para nadie, no lo presionó y tampoco pidió explicaciones.

Luego de una pausa incómoda para Taehyung donde no sabía muy bien lo que había hecho, se acomodaron en el pasto lentamente por lo sensible que se encontraban.

Jungkook cerró sus ojos un momento y decidido agregó—: Taehyung, me gustas.

El chico no supo cómo reaccionar de manera inmediata, ladeó su rostro en incredulidad y negó. Si era una broma pesada, no estaba interesado. Iba a quejarse pero Jungkook se adelantó.

—No miento, Tae. Llevo años enamorado de ti... Ni siquiera emplear el me gustas fue adecuado. E-Es mucho más que gustarme, bebé— murmuró con sus mejillas rojas.

—Mírame— pidió Jungkook—. Te juro que no estoy mintiendo, nadie me acelera el corazón como tú lo haces— tomó la mano de Kim y la llevó hasta el lado izquierdo de su pecho—. Siéntelo, solo se pone así por ti— tomó su otra mano y la llevó hasta su erección que no bajaba—. Esto también se pone así por ti...

Taehyung sentía que se iba a desmayar.

—Déjame demostrártelo, que me encantas, demasiado. Que no me importa lo que todos opinen, que solo me importas tú. Lo juro...

—¿L-Lo juras?

—Sí, bebé.

Jungkook lo tomó de su mano y lo arrastró hasta en medio donde la gente bailaba.

Lo tomó de la cintura y lo apegó a sí mismo, juntó sus narices y comenzó a besarlo suavemente. Sus manos acariciaban con atrevimiento sus caderas y parte de su trasero. Kim reprimió el chillido de vergüenza porque no quería parar el beso, se sentía tan bien.

El toque era necesitado.

—Para que veas, lindo, que no me importa si todo el mundo se entera. Solo me importas tú.

—Pe-Pero...— su corazón le decía que no cayera en sus juegos, podría ser el típico imbécil que se aprovecharía de él.

—Llevo años suspirando por ti, demasiados para contarlos. Debía contenerme de acercarme a ti porque sabía que no iba a controlarme y te iba a besar hasta dejarte sin aire... Te pido que me des una oportunidad para que confíes en mí, no soy una mala persona como todos plantean. Por favor.

Vio sus ojos sinceros y eso lo convenció para abrazarlo por la cintura y apegarlo a su cuerpo, olerlo por el cuello y frotarse cálidamente. Para Jungkook tampoco estaba siendo fácil, podía entenderlo perfectamente y ayudarlo a pasar aquella situación sonaba perfecto. Besos y abrazos.

Después de unos minutos del íntimo momento, lo llevo a la barra para poder conversar más tranquilamente.

—Lo siento estoy muy nervioso...— pidió un trago e invitó a Taehyung hacer lo mismo.

—¿Desde cuándo...?

—¿Me gustas? —Taehyung asintió con una pequeña sonrisa tímida—. Desde hace bastante... No podría decir exactamente cuándo empezó esa emoción al verte, querer ir al colegio solo por ti aún si no habláramos. Esa emoción solo nació y se transformó en esto que siento por ti. Me gustas.

—Lo siento, no sé qué decir... Pienso que es un sueño que me correspondas.

—Para mí es un sueño, Taehyung... Supongo que luego de esto realmente hablaremos y continuaremos en contacto.