Menstruation [KookTae]

46

a veces m da vergüenza ajena leer este fic :( jfñskdñfk

—¡No puedo creerlo!— chilló Taehyung e ingresó a la habitación para luego tirarse con Jungkook en la cama, asustando a Yeontan quien estaba en su tercer sueño.

—¿Qué pasa?

—¿Ya no es rollito?— Jungkook lo miró expectante sin decir una sola palabra.—Está bien.— se levantó algo desilusionado y Jungkook se lo impidió, tirándole de su mano a la cama nuevamente.

—Perdóname, rollito. ¿Qué pasa? Me pongo como un imbécil cuando te veo y no pienso bien.

—Ya veo.— le miró enojado y luego tendió su teléfono con una sonrisa.—¡Tenías carita de bebé!

Jungkook enfocó en la imagen y reprimió un jadeo de indignación. Jamás podría olvidar ese día ni su primera vez. Recordaba que Taehyung le había tomado una foto mientras estaba siendo dominado por el orgasmo. Sonrió avergonzado y desvió su mirada.

—¡Ay, qué cosita más chiquita! ¡Y pensar que te encontraba como un daddy!— gritó totalmente emocionado con sus mejillas rojitas.—¡Eras un bebito!

Yeontan gruñó y terminó bajándose de golpe de la cama para ir al living a dormir.

—¿Y ya no lo soy?— murmuró con un puchero.

—No. Tú no me dijiste rollito, por lo tanto ya no eres mi bebé. ¿Así están las cosas o no?— alzó su ceja y le dio la espalda.

Continuó viendo algunas fotos antiguas y Jungkook se acercó por atrás, acariciando sus muslos expuestos por su corto short.

—Oye, mi amor.— murmuró.

—Hmm.

—¿Qué tal si dejamos a Yeon...?

—No se va a ir a ningún lado.— le cortó Taehyung y el pelinegro golpeó su culo. Odiaba cuando Taehyung le interrumpía. Quiso azotarlo contra la cama y hacérselo bien duro como castigo.

—No quiero traumatizar al niño... además, tú y yo tenemos planes que terminar.— suspiró y controló el temblor en su voz.

—Pero koo, mi periodo de fertilidad ya finalizó, tenemos que esperar hasta el próximo mes.

—Tae, existe esa probabilidad incluso cuando estás menstruando. ¿Cuál es el problema? Si no me dices no puedo ayudarte, rollito.

Taehyung se dio la vuelta y miró a Jungkook mientras le acariciaba su cabello.

—¿Tú de verdad quieres tener hijos?

—¿Y por qué no querría? Llevo gran parte de mi vida a tu lado y sé que quiero que sea así para siempre. He planificado mi vida en base a ti, en base al amor de mi vida aunque sé que no debería ser así... Es una decisión importante pero cada vez que miro tus ojitos por la mañana me imagino a una princesita chiquita parecida a ti, o a un príncipe.

—¿D-De verdad?

—Síp, me emociona muchísimo la idea de tener un bebé en nuestra familia... Amaría que se pareciese a ti, sería tan tierno. Agh, es tan difícil expresarme pero sería demasiado lindo. Verte con el bebé en brazos sería una imagen que definitivamente derretiría mi corazón.

—Lo he pensado, sabes... y es algo importante. No solo tendremos nuevas responsabilidades, habrán nuevas prioridades en nuestra relación y no vamos a tener tiempo para otras cosas.

—Lo sé. Sé que las responsabilidades cambian y sé que a medida que pasan los años, los requisitos, por así decirlo, de una relación para poder mantenerla, digamos, van cambiando. Eso lo tengo claro. Por más que nos amemos, el ser humano por naturaleza es inconformista. Me da miedo que algún día nos cansemos de esto.