Menstruation [KookTae]

09

—Jungkook, despierta... m-mis padres llegaron...— Taehyung removía el cuerpo del mayor, jadeó molesto al ver que no respondía.

Jungkook en un rápido movimiento lo tiró a sus brazos entrelazando sus piernas y tapándolo con las sábanas oscuras, inmovilizándolo.

—Tuto.

—Pero Jungk...

—Tuto.

Lo abrazó más fuerte pero lo soltó rápidamente al escuchar un quejido de dolor del hermoso ángel. Se separó preocupado, Tae estaba acariciándose suavemente los pechos, con una carita de dolor.

Sus senos estaban sensibles y estaban más grandes, puesto que estaba próximo a su período. Jodidamente doloroso.

Para mayor comodidad, se acomodó a espaldas de Jungkook. Accedió y lo apretó contra su pecho, feliz de tenerlo a su lado y amanecer con él.

—Me van a castigar— lloriqueó al rendirse, no podía escapar de la fuerza de sus brazos.

—No te preocupes, Tae... Ellos sabían de esto.

—Si pero es que...

—Le pedí a mi papá que hablara con los tuyos porque juré que no haríamos nada. Te respeto muchísimo, a ti y a tu familia.

—Bobo— golpeó su mano avergonzado, había sido muy atento de su parte.

—Tae, mi amor...— escuchó la puerta abrirse repentinamente.

Taehyung se congeló y su corazón se aceleró.

—Vaya...— sonrió algo incómoda. Sabía que eso iba a pasar y que tenía la confianza de ambos pero no pensó que iba a sentirse así. Su marido ni siquiera quiso ver la escena.

—Ma-Mamá no, yo- nosotros no...

—Mi amor, no hace falta explicar...— suspiró—. Es domingo, pueden quedarse aquí. Tu padre y yo tenemos otra reunión con los de la empresa, cuídense y no hagan nada de lo que después puedan arrepentirse. Cuídense— la madre de Kim se despidió con un beso y abandonó la gran habitación, suspirando, sabía que era inevitable que su bebé hiciera ese tipo de cosas.

Y no servía en lo absoluto, castigarlo y reprimir estímulos que se necesitaban para que luego los hiciera a su espalda y se perdiera la confianza. Era una etapa difícil y lo último que debía hacer, era reprimirla. Su bebé estaba creciendo y no le iba a cortar las alas.

¿Para qué? ¿para que luego salga con la gracia de que va a tener un crío?

—¿Qué fue eso, Jeon?— Taehyung se levantó de la cama—. ¿Qué le dijiste a mi madre?

Silencio.

Jungkook no respondía, en cambio se fijaba en su camiseta de pijama como tonto babeando. Frunció su ceño y dirigió sus ojos a donde Jeon miraba. Se enfureció.

—¡¿Por qué siempre estás mirándome?!

—No puedo evitarlo, príncipe. Te ves precioso, no entiendo como existen personas que te desprecian...— Jungkook se apoyó en su codo y siguió admirando su cuerpo y rostro.

—Gracias, Kook... Pero aún no me explicas qué pasó con mis padres.

—Digamos que tus padres cayeron en mis encantos...

Taehyung se indignó, entonces Jungkook podría ser así de encantador con cualquiera.

—¡Entonces solo soy uno más de tu lista!

—¿Qué dices?— Jungkook rió a carcajadas.

—¡Sí, hiciste que cayera en tus encantos para seducirme y tocarme!