Anastasia.
No dejo de mirar el resultado de la prueba de embarazo que tengo en mis manos.
Dos rayas.
Eso fue lo que me bastó, para que todo mi cerebro entrara en colapso.
Observo por enésima vez el resultado de la prueba, mismo que he no parado de mirar durante los últimos veinte minutos.
Dos rayas.
Dos rayas que significaban una sola cosa.
Positivo.
Estoy embarazada.
Tengo un bebé dentro de mí.
Repetir esas palabras en mi cabeza, nuevamente, me genera otro cortocircuito del cuál me cuesta reaccionar, de no ser porque Marina, sacude suavemente mi hombro y parpadeo, dejando caer la prueba con cierta brusquedad en mi escritorio, como si de pronto me quemara en las manos.
—¿Ana?—
—¿Qué tan...?— parpadeo, tratando de asimilar todo lo que ha cambiado en menos de una hora— ¿Qué tan seguras son estas pruebas, Marina?—
—Según la dependienta de la farmacia, ambas marcas son las mejores en prueba de embarazo, tiene un resultado más efectivo y acertado que las demás...—
—Entiendo...— murmuro.
Vuelvo a tomar la prueba, donde esas dos rayas me miran con cierta burla ante mi broma anterior, acerca de que se saldría negativa, solamente por querer darle algo de apoyo moral a mi amiga embarazada, también.
Se supone que saldría negativa, no con el resultado de que tengo un bebé dentro de mi útero que crecerá con el paso de los meses.
Sin embargo, mi cabeza sigue negada a la razón de que sí es posible que esté embarazada.
Ethan y yo, dejamos de preocuparnos por el uso del condón desde que volví, porque prácticamente, ambos nos hicimos a la idea que si vamos a tener a nuestro único hijo, sería por medio de la ayuda de los tratamientos de fertilidad.
No sería ahora, por supuesto. Si no, hasta que ambos nos sintiéramos seguros de que es nuestro momento de traer a un heredero a la cuna de sangre de sus padres y sobre todo, un bebé que formaría a nuestra familia.
¿Cómo es posible que hayamos logrado concebir de manera natural?
Es cierto, tenemos demasiado sexo que parecemos unos enfermos, pero, incluso con tantas veces teniendo relaciones, sin protección. La biología del ser humano nunca es exacta al punto de que mi óvulo, haya logrado pegarse con unos de sus espermas para fusionarse en una vida nueva.
Los médicos me lo dijeron, a raíz de la extracción de unos mis ovarios junto a los traumas de mi cuerpo, sería más complicado concebir de forma natural y que lo más recomendable, era que me sometiera a los tratamientos para un mejor resultado.
Con esa seguridad que para tener un bebé, tendríamos ayuda asistida. Optamos por dejar los condones, y cambiar mi método anticonceptivo, para seguir disfrutando de un buen sexo sin barreras de por medio.
La sensación de piel contra piel, es más agradable de lo que realmente se pinta.
Suelto todo el aire que le quedaban a mis pulmones y nuevamente, miro la prueba con el evidente resultado positivo que hay marcado con dos líneas rosadas. Paso mis manos por mi cabello, antes de tomarlo en pequeños puños a mis costados, mientras que mi cerebro en cortocircuito trata de recuperarse a la par que mis pensamientos, se vuelven más frenéticos.
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Atractiva Seducción (HDLF #1)
General FictionHerederos de las Flores #1 Anastasia Becker y Ethan Stirling son dos personas totalmente opuestas pero al mismo tiempo completamente iguales en lo que respecta en su ambición por el poder y demostrar quién es el mejor. De niños eran las personas má...