Ella y yo
Dos locos viviendo una aventura
Castigada por Dios
Un laberinto sin salida
En donde el miedo se convierte en amor
Alana Guzmán estaba enamorada.
Enamorada de un Álvarez.
Su mundo entero era su novio y sus ojos.
Alana estaba perdidamen...
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Alana Guzman 23 años "Kevin, no podemos hacer esto, está mal."
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Kevin Alvarez 24 años "Mírame a los ojos y dime que no sientes lo mismo que siento yo."
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Óscar Álvarez 28 años "Nadie te va a amar tanto como yo. Lo hago porque te amo."
Una relación de en sueño.
Alana conoció a Óscar en una noche de antro. Un baile y unos tragos fueron suficientes para que la llama entre ellos se encendiera.
Luego comenzaron los mensajes, las llamadas y las salidas, hasta que la relación se formalizó y el amor comenzó a nacer.
Alana estaba perdidamente enamorada de Óscar; la trataba como reina. La amaba y ella lo amaba con la misma intensidad.
Todo era perfección, ella no podía pedirle más a la vida.
Su amor y necesidad eran tanta que Óscar terminó rogándole que viviera con el. No podían estar separados ni un día más.
Así que ella acepta, y es así como termina viviendo bajo el mismo techo que la familia Álvarez quien la recibió con los brazos abiertos.
Lo que ella no sabía era que no sólo el hermano de en medio tenía sentimientos por ella.
Kevin Alvarez no sabía que era eso que sentía cada vez que veía a su cuñada.
Su pecho de llenaba de emoción cada que su atención se dirigía a él.
Cada vez que ella con amabilidad le preguntaba como le había ido en el entrenamiento de hoy.
Cada palabra que cruzaba con ella se mantenía en su cabeza por días enteros.
Kevin sabía que estaba mal.
Pero no podía evitarlo.
Kevin la miraba siempre.
Kevin admiraba cada paso que daba.
Kevin no era tonto.
Kevin comenzó a notar cuando las cosas comenzaron a ir mal.
El brillo en sus ojos se iba apagado, las oraciones se volvieron más cortas y las pequeñas manchas moradas/verdosas aparecían en su cuerpo que comenzaba a crecer.
Kevin sospechaba lo que estaba sucediendo.
Y no pudo evitar pensar que el la trataría mejor.
Si tan solo fuéramos
Ella y yo.
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