Revolución- TomTord (Español)

32

Thomas estaba buscando los ingredientes para la comida, sabía que tenía que hacer algo rápido, pero al mismo tiempo quería impresionar a Tord, así que se quedó un momento viendo el refrigerador hasta que una presencia se puso muy cerca de él y habló.

— Podríamos hacer hamburguesas caseras con ensalada, al parecer tienes todos los ingredientes.-. Tord comentó con una sonrisa mientras miraba dentro del refrigerador.

— ¡Oh!, si hagámoslo, ¿te encargas tu de cortar la lechuga y el tomate?-. El mayor le sonrió con ternura al menor.

— Por supuesto.-. El de cuernos le devolvió la sonrisa.

Sacaron los ingredientes y los pusieron encima del mesón de la cocina, se lavaron las manos; Tom colocó la carne molida en un recipiente y le hecho un huevo, luego puso otras especias y empezó a amasar la mezcla con las manos, mientras Tord picaba la lechuga pero de repente sintió como el cuchillo pasó a llevar parte de su dedo haciéndole así un tajo no muy profundo.

— Au...-.

El bajista miro al chico y vio como de sus dedo salía unas pequeñas gotitas de sangre, instintivamente tomó la mano del menor y se llevó el dedo de este a su boca para lamer la herida.

— Ah... Eh...¿To-Tom?-. Dijo Tord nervioso y con sus mejillas coloradas.

Thomas sacó el dedo del chico de su boca rápidamente, su cara se coloreó de rojo hasta las orejas.

— Yo... Eh... Perdona, fue raro, lo sé, pero es que... Ah... Y te manche la mano con un poco de carne... Uh... Lo siento soy un desastre...-. El chico nervioso se lavó las manos y busco un pequeño botiquín que tenía guardado en la cocina y sacó un parche curita para el menor quién se lavó las manos y la herida.

Antes de que Tord se pudiera secar las manos, Tom agarró con delicadeza las manos del menor y las secó con un paño, para luego ponerle el parche curitas en su dedo.

— No eres un desastre...Los lobos lamen sus heridas para sanarlas, así que fue instintivo, lo entiendo...-. El oji rubí le sonrió con dulzura y sus ojos brillaban con vida por alguna razón.

El de ojos negros trago en seco, mientras sonreía nervioso al menor, cada vez lo encontraba más bello, y quería abrazarlo... Y una parte de él muy encerrada y escondida quería también marcarlo, pero como siempre hacía un esfuerzo sobrehumano por reprimir a aquella parte.

— Gracias...-. Sonrió más tranquilo el bajista.-. Bien, hay que seguir cocinando.-. Desvió la mirada, soltando las manos del menor.

Se dispusieron a hacer cada uno su tarea, mientras recordaban cuando fueron al Arcade y lo divertido que fue.

En otra parte se encontraba una Alfa sentada en el sillón de su casa tomando un poco de café mientras que con la otra mano tenía unos papeles.

— Mi amor, ¿te llamó nuestro muchacho?-. Dijo un Omega quién se sentaba al lado de la mujer.

— Si, Tordy me pidió que nos juntáramos a hablar, es algo importante... Creo que no tiene que ver con él, me voy a encontrar con más personas aparte de mi niñito.-. Dejó su taza arriba de la mesita que tenía a su lado.

— Sé que dijiste que probablemente no fuera de él... Pero y si ¿está embarazado?-. Dijo nervioso el hombre.

— Ay... Jensen, sabes que Tord no es tonto y sabe defenderse, confía más en él.-. Katherine le dio un beso dulce a su esposo quién lo recibió con gusto.

— Ya... Tienes razón, a todo esto, esos son los papeles de los Ragdwell ¿cierto?

— Si, descubrí que tiene un hijo, pero este chico está bastante distanciado de su familia...Al parecer sabe pensar por sí mismo y se dio cuenta que su familia es una masa de malas cosas.-. Sonrió la mujer.-. Al parecer habrá que buscar a este chiquillo y hablar con él.

Katherine miró a su esposo, quién le devolvió la mirada y entendió que su mujer pensaba que tenía la delantera con respecto a esa familia, esa confianza era encantadora pero a veces daba mucho miedo, la Alfa era una muy buena persona pero su perspicacia también era de temer.

------------------------------

Un abrazo para ustedes <3