Tu mirada

49 "Borrachera"

Andrea

Dos meses después...

Increíblemente ya es mayo, en un par de días me caso con Emily, estoy flipando, el amor de mi vida finalmente será mi esposa, después de meses estresantes, ambas necesitábamos enfocarnos en no dejar pendientes de trabajo, pequeños detalles de la boda que tuvimos que resolver ambas, elegir nuestro destino para la luna de miel, el proyecto de Emi con mi hermana, a penas nos ha dado tiempo de relajarnos. Por cierto, la chef, resultó ser Emma.

Dentro de todo este caos, siempre tuvimos tiempo para ambas, y eso es lo que más amo de Emily, que, aunque ella estuviera cansada, siempre está dispuesta a escucharme y darme cariños o como ella le dice "mimarme", obviamente yo hago eso por ella.

Estoy jugando con Chanel, tumbada en el sofá y un lado de mí está mi hermana, ya es de noche. Hoy Emily irá con sus compañeros de trabajo a un bar, me dijo que le harían su despedida de soltera, por lo que estoy pendiente de mi celular por si me habla, para que vaya por ella o algo.

Por mi parte veré una película y tomaremos unas birras, en el sofá, a veces Ximena y yo, solo necesitamos estar con nuestra compañía sin hablar, sentir que estamos la una para la otra siempre, sin importar el momento. Estábamos enfrascadas viendo una película detectivesca, podría decir que, si me asusta un poco, ya que es sobre la investigación sobre un tipo de secta, algo así por el estilo, por lo que miramos en la descripción esta basado en una serie de libros, en total son tres películas, y nos agradó más, que es española.

Mi celular comienza a timbrar, me sobresalto un poco, ya que estoy ganchada a la película, me fijo en el nombre y contesto inmediatamente.

-Amor - le digo a Emily al contestar el celular.

-Mi amor precioso - suena ebria -. Ven por mí, por favor, ya estoy ebria - me confirma su ebriedad y me causa gracia.

-Inmediatamente voy mi cielo - le digo conteniendo mi risa -. ¿Con quién estás? - solo quiero confirmar que esté segura.

Le hago señas a mi hermana para que me acompañe, quiero que ella maneje para que yo siga hablando con Emily. La ventaja de mi apartamento es que todo me queda cerca y más el bar donde está mi prometida.

-Estoy con mis compañeros de trabajo y mi jefa - me contesta y me tranquiza el saber que está acompañada.

-Quédate con ellos, ya voy en camino.

-Me saldré para esperar por ti.

En ese momento, sentí desesperación, más por el recordar su última borrachera, es un poco terca mi mujer, y más pensar que alguien puede aprovecharse de ella.

-No, mi amor, quédate dentro del bar, con tus compañeros, en unos 15 minutos llegamos - le dije con mi voz más serena, para no demostrar angustia.

-¿Con quién vienes? - sonó seria.

-Con Ximena, celosa - le digo conteniendo la risa.

Subimos al auto, colocándome el cinturón de seguridad, en lo que mi hermana enciende el auto y comienza a conducir.

-Más te vale, porque si no te corto los dedos - sí que esta ebria, nunca me dice esas cosas -. Son solo míos, Andrea - sonó molesta y autoritaria.

-Por supuesto que son solo tuyos, mi princesa - me causa gracia Emily ebria.

-¿Te falta mucho para llegar? - pregunta, me imagino que está haciendo un puchero.