23 "Destino"

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Andrea

Velé durante toda la noche el sueño de mi novia, no supe en qué momento el cansancio me venció, la alarma sonó espantándome y alterándome, aunque quiera quedarme tengo que levantarme y arreglarme, hoy tengo una junta de negocios muy importante y de eso depende mi futuro.

Después de darme un baño con agua fría, para despertarme, y arreglarme, fui a prepararme un café muy cargado. Regreso a la recamara para mirar a mi novia, está despierta sentada en la cama, tiene el cabello húmedo.

-Mi vida hermosa, ¿quieres desayunar? - le preguntó sentándome a un costado de ella.

-No tenga hambre - recargó su cabeza en mi hombro.

-Entonces al menos te haré un té.

-Si está bien.

-Termina de arreglarte, se te hará tarde mi amor - le di un beso en la coronilla.

-No quiero ir a trabajar, mejor nos quedamos - me miró con sus ojitos triste.

-Me gustaría quedarme mi amor - le di un pico.

-Pero tienes que ir a trabajar - suspiró.

-Así es princesa, debo ir porque tengo una junta con un cliente que va a invertir en mi empresa y de esto depende mi futuro - le expliqué.

-Entonces ve, yo me quedaré aquí hasta que regreses - hizo una media sonrisa.

-Mejor ven conmigo, te quedas en mi oficina en lo que termino la junta, cuando finalice, espero que sea antes de mediodía, vamos a donde tú quieras mi bella princesa.

-Si quiero - sus ojos brillaron y yo me emocioné.

Llegamos a mi oficina, dejé a mi novia recostada en el sofá y yo me fui a la sala de juntas, donde tendría la reunión con los inversionistas. Pasamos un par de horas en las negociaciones, en las cuales todo lo que me propuse, lo conseguí. Así que, terminando, solo me despedí de todos y me fui rápido a la oficina por mi hermosa novia.

La encontré platicando con mi asistente, se mira tan hermosa sonriendo, solo caminé más rápido hacia ella y le estampé un beso en sus labios, el cual ella me correspondió, con una enorme sonrisa, haciéndome suspirar cuando nos separamos.

-Yo también te extrañé - me sonreía.

-He terminado, así que voy por mis cosas y nos vamos.

Entré rápido a mi oficina por mi bolso y las llaves del auto.

-Lucia, cancela todo lo que queda para el resto del día, yo me retiro y ya no regreso, nos vemos mañana, así que también te puedes ir temprano - le di indicaciones a mi asistente antes de irme.

-Inmediatamente me hago cargo, disfrute su día y gracias - me contestó mi asistente.

Llevaría a mi novia a comer, no estábamos muy lejos de la oficina, cuando miró una cafetería y me pidió que fuéramos, haciéndome un lindo puchero, así que simplemente le concedí ese deseo. Ordenamos un par de cafés, esperamos y nos fuimos a sentar en las mesitas de fuera. Al sentarse se queda mirándome, recargándose sobre su mano, sosteniendo el café, muy seria.

 Al sentarse se queda mirándome, recargándose sobre su mano, sosteniendo el café, muy seria

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