-Fue durante una nevada en invierno, tenia apenas dieciséis años, con solo dos años de haberme presentado como omega, volvía de la escuela abrigada de pies a cabeza, era un invierno realmente frio - Minho de siete años de edad escuchaba atentamente a su madre - Cualquiera pensaría que mi aroma no podría ser percibido entre tanta tela, pero no fue así, justo en el momento en el que iba a tomar el autobús una mano me detuvo...
El pequeño Minho abrió sus ojos con sorpresa - ¡¿Quien era?! - Exclamó emocionado creyendo saber de quien se trataba.
La madre de Minho, una joven y hermosa omega llamada Hyoyeon, tomó a su hijo entre sus brazos y con una pequeña risa continuó su relato - El hombre que me detuvo me miró a los ojos por un largo rato, tardo tanto en decir una palabra que comencé a asustarme, el autobús ya había partido sin nosotros y eramos las únicas personas paradas en ese lugar.
-¿Qué era lo que quería? - Preguntó impaciente.
-Cuando por fin se animó a hablar solamente me dijo...
-Amo las mandarinas - Interrumpió el padre de Minho y alfa de su madre.
-¡Papá, no arruines la historia, iba en la mejor parte! - se quejó el pequeño niño poniéndose de pie.
Las risas de ambos padres no se hicieron esperar.
-Pero cachorro, esa no es la mejor parte de la historia - Dijo su padre despeinando sus cabellos.
-¿No lo es? - Preguntó confundido intentado reacomodarlos.
-Claro que no, la mejor parte fue cuando tu llegaste a nuestras vidas, tan solo un año después de habernos conocido.
-Ese fue el mejor día de mi vida - añadió su madre.
-Papá, yo solo quiero saber una cosa.
-¿Qué es lo que quieres saber cachorro? - Preguntó tomando asiento al lado de su omega, entregándole una humeante taza de chocolate caliente.
-¿Por qué le dijiste eso a mamá? - Minho volvió a sentarse para prestarle más atención.
Lee Taemin, su padre, suspiró alegre al recordar ese día- La mandarina es mi fruta favorita - Lo dijo con obviedad.
Minho dirigió su mirada a su madre y emocionado exclamó - ¡Mamá huele a mandarinas!
Taemin se acercó al cuello de su omega y respiro profundamente - Este exquisito aroma fue el regalo que la diosa luna nos dio para que yo pudiera encontrar a mi pareja destinada - Afirmó - Así como mi padre encontró a su omega destinado al oler su aroma a toronjas, los omegas de los Lee siempre huelen a nuestra fruta favorita cachorro, algún día, cuando te presentes como alfa podrás encontrar a tu pareja destinada por su olor, esa es la voluntad de la diosa luna.
Minho creció convencido de que así seria, a sus diez años de edad ya había decidido cual era su fruta favorita, aquella que siempre quería comer, que hacia que se le hiciera agua la boca al olerla, Minho estaba convencido de que la pareja que la diosa luna tenia para él debía oler a fresas y con esa idea grabada en su mente los años pasaron.
Taemin y Hyoyeon siempre supieron que su hijo seria un gran alfa, así que cuando a este le tomó un par de años más de lo normal para presentarse ellos no se alarmaron, solo esperaron lo inevitable.
Cada día Minho se desesperaba más, sus amigos y compañeros de clases comenzaron a presentarse desde los doce años, el ya tenia quince y comenzaba a desanimarse pensando en que seria un beta, sin aroma y sin la capacidad de oler a su pareja destinada, en el peor de los casos no tendría una, idea que lo llenaba de angustia, para los de su especie, los lobos, el tener una pareja destinada lo era todo, la diosa luna no pudo haberse olvidado de él ¿o si? se preguntaba a diario y le preguntaba a la luna cuando seria el día en que se presente como el gran alfa lobo que debía ser, para así comenzar a buscar a su omega.
-No te desesperes Minho, en la clase de castas ya nos explicaron que hay quienes se presentan hasta los veinte años, apenas tenemos quince todavía tienes cinco años así que no te hagas daño sobre pensando - Dijo Changbin, el mejor amigo de Minho, un fuerte alfa lobo, quien se presentó aun antes que la media, a los diez años siendo el gran orgullo de su manada, Minho aceptaba que le tenia algo de envidia.
-Tu no lo entiendes porque te presentaste a los diez años - Chasqueo con la lengua y siguió caminando - Mis padres se conocieron a los dieciséis y a los diecisiete ya estaba naciendo yo, mis abuelos se enlazaron a los quince, y mis tíos a los dieciséis ¿que no lo entiendes? a este paso jamás conoceré a mi predestinado.
Changbin soltó un breve suspiro, comprendía la desesperación de su amigo ya que él mismo la había vivido, hasta el día en el que conoció a su omega predestinado, cosa que aun no le decía a Minho por miedo a herir aun más su orgullo - Amigo, confía en la diosa luna, ella le dio a cada lobo una pareja destinada, así la conozcas a los cuarenta, todo será por voluntad de la diosa luna.
-Claro - Asintió sin ánimos.
-Además, no se porque estás tan apurado en presentarte, el oler claramente a cada persona que se te acerca no es tan bueno como parece, es asqueroso y en lugares cerrados termina por marearte, aun más cuando ya conociste a tu omega, todos los demás aromas te provocan asco...
Carajo, pensó Changbin.
Minho alzó una ceja y detuvo su andar- ¿Tienes algo que decirme Changbin?
-Preferiría no hacerlo - Intentó continuar su camino pero la mano de Minho lo detuvo.
-Vamos Bin, no me voy a molestar, ni me voy a deprimir - Insistió.
Changbin suspiró y lo miró a los ojos - Bien pero no te enojes, por favor.
-¿Como crees que me voy a enojar porque mi mejor amigo, mi hermano, encontró a su omega destinado?
-Minho, su nombre es Hyunjin y es un omega lince.
La gran sonrisa de Minho desapareció al escuchar las palabras de Changbin, no había nada peor para el honor de un lobo que enlazarte con un felino, Minho prefería evitarlos al tener la fama de ser personas caprichosas y traicioneras, jamás en su vida tendría uno como amigo, mucho menos como pareja.
ESTÁS LEYENDO
¿Mi Destino eres tu?
FanficMinho desde el día en el que se presentó como alfa comenzó a buscar a su omega destinado, convencido de que encontrará su pareja destinada en la persona que posea el aroma de su fruta favorita tal como sucedió con sus padres.