Queridas... nos aproximamos a la famosa noche de luna llena y la cosa pinta fea... ¿Que creéis que ocurrirá?
Os leo al final!Un nuevo amanecer.
Era un nuevo día que lejos de traerle felicidad solo provocaba un martilleo constante en su cabeza porque eso significaba que solo quedaban cinco noches para luna llena.
Si a ese recuerdo debía añadir lo sucedido durante el baño la pasada noche evocando el recuerdo de la desnudez del lobo, todo ese conjunto de pensamientos formaban una contradicción que le provocaba infinito temor.
Había visto y tocado partes del lobo que ni siquiera podía imaginar y que la avergonzaba hasta límites insospechados.
Le odiaba. Le detestaba. Le generaba una sensación de rechazo inimaginable por todo lo que él le había hecho. Y aún así no podía evitar sentir un calor extraño en su cuerpo al percibir su cercanía.
Puede que eso fuera lo que más temía, la propia traición de sus instintos a los que deseaba controlar y tomaban rumbo propio sin tener en cuenta su juicio moral.
Sabía que aquello solo era un efecto de la cercanía con la que el lobo la obligaba a estar junto a él, estaba completamente segura de que esa inexplicable sensación la sentiría de un modo más intenso y colosal con otro hombre como Roger, del que había pasado media vida enamorada.
Cuán distinta habría sido su vida de haber podido estar junto a él. Tal vez Roger fuera un simple panadero que trabajaba desde que el sol despuntaba hasta que se perdía en el horizonte y mantenía una buena vida. No poseía grandes riquezas ni un gran castillo como el lobo, pero Melissa nunca había aspirado a los lujos a pesar de provenir de una buena familia, de hecho no se había quejado por la pobreza a la que su padrastro las había sometido tanto a su madre como a ella en los últimos años.
Se conformaba con una vida modesta, pero habiendo encontrado el amor a su lado.
Y amor era lo que menos iba a encontrar en aquella farsa de matrimonio, pero tampoco lo deseaba si debía ser sincera.
No quería nada de ese lobo, ni tan siquiera el deseo que en él provocaba como había podido constatar la noche anterior. Puede que él la detestara por quien ella representaba, al fin y al cabo eran enemigos acérrimos pero no había podido controlar sus instintos quedando constancia que deseaba tomarla y que de no ser por esa tradición familiar, ya la habría poseído en su propia alcoba.
¿Por qué la torturaba de aquel modo? Podía simplemente evitarla y acudir a la torre en la primera luna llena, sin embargo la acosaba constantemente, la hacía permanecer a su lado y vertía sobre ella constantes amenazas que no surtirían efecto porque no le inspiraban miedo.
¿Tal vez era por eso?
¿El lobo se había dado cuenta de que su juego verbal no funcionaba y ahora deseaba desquiciarla siendo consciente de que intimar con él era lo que más detestaba?
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La Melodía del Lobo
Historical FictionNo tientes al lobo, podría comerte... ¡Ya podéis agregarla a vuestras bibliotecas! Esta historia comenzará después de "Cohibida"