Gemma
Estaba en la camioneta del maestro Natt o por así decirlo, ya que por el momento por el don de Pierre nos encontrábamos en un vacío sin que hubiera algún escenario alrededor, todo se encontraba oscuro y eso me ponía nerviosa causando abrazarme a mi misma.
—No temas, es porque aún no escojo el escenario por esa razón mi don nos mantiene en este lugar sin fondo o que pareciera que no hay salida, pero siempre habrá una salida, Gemma —dijo Pierre con una amigable sonrisa y yo le regale una corta sonrisa por sus calmadas palabras— ¿Tienes los bocetos o imágenes de referencia que te pedi para el escenario de la fiesta? —preguntó él extendiendo su mano y yo le di un asentimiento sacando unas hojas.
—Reto me ayudó a dibujarlo —le entregue la hoja con él dibujó y Pierre alzó sus cejas alargando su sonrisa al impresionarse de tal obra— Es un teatro abandonado, sin los asientos tendríamos una gran zona libre, ¿Puedes lograr que el techo sea de cristal para ver el cielo nocturno?
—No será el cielo nocturno el que conocemos, pero... —dijo Pierre cerrando sus ojos empezando a concentrarse.
Empecé a sonreír al ver como la oscuridad de nuestro alrededor iba desvaneciendo al que un escenario se fue creando alrededor de nosotros. He tomado como referencia el teatro del palacio, solo que le he hecho algunos cambios, quise que el lugar se viera abandonado sin mucha luz teniendo algunas telarañas colgados en el techo, la pintura en las paredes esta malgastada, las cortinas que estaban en el escenarios están rotas estando dentro del tema, los tonos son mucho más opacos, pero...
Alce mi mirada juntando mis manos formandolas en un puño mirando el techo de cristal donde se podían ver claramente las estrellas con la luna, las pequeñas resplandecían como luces navideñas haciéndome el favor de animar un poco el lugar, la luna lanza su resplandor a la bola de espejos, como esta será la primera fiesta alocada para los celestes, no quise asustarlos teniendo luces coloridas bailando en todo el lugar, la bola de espejos ayudará a iluminar un poco el lugar para que se mantengan tranquilos.
—Puedo crear un cielo nocturno artificial, ¿Te gusta? —preguntó él teniendo su vista al cielo con una sonrisa orgullosa de su trabajo.
—Me encanta —dije con gran sonrisa en mi rostro y empecé a caminar mirando todo a mi alrededor— ¿Dónde están los baños?
—En el mismo lugar donde están los baños en el teatro del palacio —dijo el señalándome la puerta donde detrás de esa puerta debe estar ese pasillo para llegar a los baños, pero sin los camerinos.
—Bien, aunque... —me detuve estando debajo de la bola de espejos, hice una pequeña mueca al no estar convencida con algo, me sujetó la barbilla tratando de encontrar una solución.
—¿Hay algo que te disguste? —preguntó él poniéndose a mi lado viendo alrededor del salón tratando de encontrar mi disgusto.
—Se que el tema es de halloween, pero creo que he exagerado con la oscuridad, quizás... —en ello chasque los dedos al ocurrirme cómo solucionarlo— ¿Puedes poner unas pocas velas colgadas en la pared como en la antigüedad.
Pierre dio un asentimiento, cerró sus ojos manteniéndose quieto y en ello unas pocas velas empezaron a parecerse en las paredes iluminando más el lugar.
—Mucho mejor —dije alargando mi sonrisa mirando con gran atención el lugar para ver si había otra cosa— ¿Qué te parece?, Pierre —pregunte volteando a ver y él miró a su alrededor hasta dando una vuelta para ver todo detalle analizándolo.
—Me agrada —dijo él regalándome una sonrisa— Me pareció astuto que lo escogieras en un teatro, ya que en este lugar la gente está disfrazada y que lo hubieras hecho abandonado está ligado a la fecha de halloween dando este estilo un poco gótico, ya que con la bola de espejos y el techo le diste un equilibrio para que no sea una casita del terror —dijo él con poca gracia al final y yo saque pequeñas risas.
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POTESTAD
FantasySe dice que los más afortunados padecen el síndrome de Alejandría, pero Gemma fue una excepción. Unos ojos morados no hicieron que su padre estuviera presente en su vida, ni le apareció dinero para escapar de la pobreza o le dio la cura de la grave...