Respire hondo y suspiré tratando de tranquilizarme, no te rindas Gemma, este no es el fin, puedes ir haciendo las tareas que el director me pidió, destape la caja de la academia, con algo de esfuerzo saque el gigantesco libro y empecé con la primera página.Pasando el tiempo recostada con los codos y el vientre pegados en el suelo, mis pies se encontraban en el aire moviéndose por delante y por detrás entreteniéndome mientras que yo iba leyendo del libro.
Obviamente las chicas que pasaban en el pasillo se iban burlando de mi, logre escuchar algunas de ellas decirme que sin duda alguna era de la calle y creo que una me llegó a decir que iba ser la primera mascota de este piso para que me ande comportando como un perro callejero sin hogar.
Pero no les hacía caso, mi prioridad ahora era ver que me iba a dedicar en mi vida, hay tantas carreras por las que quiero estudiar, arte, cocina, diseñadora, veterinaria siempre me ha interesado tratar con animales ya que por mi situación no pude hacerme cargo de un animal, apenas tenía dinero para la comida de mi madre.
Pero...veía la de administración de empresas, claro que es una carrera muy complicada, estaría siendo más estúpida en escogerla con mi pequeño cerebro, pero...me sujete del collar de mi madre mostrando seriedad a esto, el abuelo y la mugrosa de mi tía no se pueden salir con la suya, la empresa Astrea debió manejarla mi madre al haber tenido este collar como mi tatarabuela, mi bisabuela y mi abuela manejaron de esa empresa con este collar puesto y por culpa del abuelo mi madre no pudo seguir con esa tradición, pues yo volveré a hacer esa tradición.
Con valor puse mi índice en el texto que dice "Administración de empresas", está decidido, administración de empresas, una vez que me gradué...saque una sonrisa de malicia, iré con mi abuelo mostrándole mi diploma y le diré "Aquí esta el collar de la abuela y mi diploma para poder manejar la empresa Astrea como es mi derecho, así que estás despedido tú y mi tia"
—Ciao...
Me asuste cerrando el libro, mire a Mia con enfado que ella me miró con algo de culpa teniendo sujetas sus manos, yo baje la mirada volviéndome a sentar en el suelo.
—Aun tienes el descaro hasta de despedirte de mí —dije con enfado guardando el libro en la caja de la academia.
—¿Qué?... —dijo ella confundida y sacó pocas risas—No, no, ciao...significa hola en mi idioma.
—¿Qué es lo que quieres? —pregunté agarrando de nuevo las dos cajas abrazandolas de modo de protección mirando cautelosamente a Mia. Ella se sentó al lado dando un suspiro exhausta.
—Mi dispiace —dijo ella sonando con culpa mirándome con unos ojos de tristeza, yo alce la ceja un poco confundida.
—Eso significa...
Ella rodeó los ojos con una corta sonrisa.
—Significa que lo lamento. No quise...agredirte de esa forma, yo entre en pánico cuando tu mano... —miro mi mano izquierda con algo de desprecio— Me tocó.
Yo mire mi mano humana, la volteé a ver con seriedad.
—El director me explicó que la pueden ver con mal al que simboliza sangre y caos, cosas estúpidas, pero no pensaba que a este nivel.
—Debes entender que...para nosotros los potestades es algo nuevo tener a una segunda mestiza...entre nuestra raza, después de lo que hizo el primero.
—Pero yo no soy él —dije estresada poniendo mis manos en mis raíces del cabello.
—Lo sé, lo sé, ragazza, pero...como dije...es nuevo para nosotros.
Yo di un suspiro rendida.
—Como para mi esto es tan nuevo, pareciera que...estoy en otro mundo. Todo parece estar hecho de oro, diamantes, plata, todos aquí parecen modelos, incluyendote —dije con una corta sonrisa y ella se sonrojaba bajando la mirada— Pero su actitud... —dije con una mueca— Ya ni en mi calle tenían esa forma de actuar.
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POTESTAD
FantasíaSe dice que los más afortunados padecen el síndrome de Alejandría, pero Gemma fue una excepción. Unos ojos morados no hicieron que su padre estuviera presente en su vida, ni le apareció dinero para escapar de la pobreza o le dio la cura de la grave...