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CAPITULO 45"Hermano"
-¿En donde estabas?- lo confrontó Shelly bastante alterada en cuanto cruzó la puerta.
-¿Que pasa, Shelly? ¿porque tan alterada?- preguntó sin comprender mucho el comportamiento de la chica, él siempre que salía de fiesta se ausentaba por un largo tiempo a veces por días y nunca se molestaba a veces incluso lo acompañaba ¿porque ahora le afectaba?
-¿En donde estabas, Duff? No me mientas ¿me estabas engañando? ¿estabas con otra?- le preguntó bastante enojada.
-No, claro que no ¿De donde has sacado eso? puedes calmarte ¿has estado despierta por cuanto tiempo? te vez cansada.
-No me distraígas ¿donde estabas?
Las útimas semanas habían discutidos por cosas insignificantes, no etendía lo que sucedía todo pareçía ir bien entre ellos, pero de repente algo sucedió y ahora discutían por todo, eran principios de 1990 en vez de comenzar bien un nuevo año parecía que estaba haciendo lo contrario.
-Estaba con tu hermano, ahora vive a una cuadra de aquí, y yo bueno soy su cliente, me quedé un rato en su casa, luego comenzamos hacer una ruta por todos los bares ¿quieres mas explicaciones?
-Espera, espera ¿Mi hermano es tú dealer?- le preguntó incredula.
-Sí, ¿que tiene?
Pero Shelly ya estaba tomando la llave de su motocicleta herratica, mientras soltaba varias maldiciones.
-Lo voy a matar, no le presenté a mis amigos para que se volviera su dealer.
-Si somos más exactos a mi no me lo presentaste, yo ya conocía a Terry incluso antes que a ti, ibamos en el mismo grado.
-No me importa, lo voy a matar.
-Alto, Shelly.- le pidió a veces la rubia se ponía de una manera tan frenética que le costaba poder razonar con ella no entendía lo que le sucedía, antes solía ser mucho más relajada,
-No, Duff, le advertí a él sobre esto, sabía que solo se acercaba a mi para aprovecharse, todo el mundo quiere aprovecharse de mi, mi propia familia, no puedo confiar en nadie.
-¡Ni siquiera sabes donde vive!
Lyn volteó a ver a Duff extrañada luego pareció reflexionar sus palabra y se dejó derrumbar sobre el suelo mientras ponía la cabeza sobre sus rodillas, intetando tranquilizarse un poco a veces no sabía lo que sucedía dentro de su cabeza su pensamientos parecía pasar tan rápido.
-Tienes razón, soy tan idiota, ni siquiera sé... ¿a donde iba ir?
Duff se puso en cuclillas para quedar a su altura con la mano levantó su barbilla haciendo que lo mirara a los ojos.
-Te llevaré a casa de Sheller, solo promete que no lo mataras.
-No lo mataré.- le prometió poniendo los ojos en blanco.
