ENTRE LA IMAGINACIÓN Y LA REALIDAD - KINNPORSCHE

Part 69

JeffBarcode

Todo el cast continuaba festejando, la comida poco a poco se iba terminando y las bebidas comenzaron a ponerlos más alegres; minutos después ya un micrófono había sido pedido para comenzar a cantar, y aunque ya era bien entrada la noche, el festejo se notaba que iba para largo.

Lo bueno de todo esto, es que Barcode tenía el permiso de sus padres de estar en este evento tan especial. No todos los días se terminaban las grabaciones de una serie, y también, no todos los días se tenía la suerte de trabajar junto con grandes compañeros y staff. Barcode estaba viviendo el gran sueño que todo principiante podría desear, estaba muy agradecido con la oportunidad y esto bien lo sabían sus padres.

Barcode estaba disfrutando mucho el festejo al ser el primero en su recién iniciada carrera de actor, y lo mejor de todo es que no estaba solo en ello. En el proceso de grabación de la serie y después de haber trabajado muy duro, su suerte solo pareció crecer y crecer, ya que gracias a esto también conoció el amor. Tener a su lado a Jeff, no, ser novio de Jeff Satur, para Barcode era como un sueño, uno que tenía atrapado a su corazón. Barcode amaba a Jeff y Jeff amaba a Barcode, que más podría pedir.

Jeff y Barcode se encontraban en una de las mesas ajenos al barullo que tenían sus compañeros y staff con el karaoke festejando alegremente, pues a pesar de tener dos de las mejores voces, ellos preferían concentrarse el uno en el otro y pasar un buen tiempo juntos. Ambos estaban muy felices y desde donde estaban, bien podían ver divertidos lo que los demás hacían.

Barcode se había levantado al baño dejando por un momento solo a Jeff, así que al verlo de regreso a la mesa, soltó un suspiro al ver lo guapo que se veía su novio. A Jeff le encantaba poder llamarlo de esa forma sin tener que preocuparse.

En esto estaba Jeff, contemplando como Barcode se movía entre la gente para llegar hasta donde él se encontraba, cuando su celular sonó.

— Menos mal escuchaste el celular – la voz de Apo sonaba del otro lado del celular.

— ¿Qué quieres Apo? – murmuró malhumorado Jeff pues su amigo lo estaba distrayendo de lo que de verdad le importaba.

— Todavía estas en la fiesta, ¿verdad?

— Sí... Espera... - Jeff comenzó a mirar a todos lados, sin encontrar lo que buscaba — ¿Por qué tú no estas acá? Y tampoco está P'Mile, ¿A dónde fueron?

Jeff se rascó la cabeza al darse cuenta que su amigo se había escapado. ¿Cómo no se le ocurrió antes?

— P'Mile está conmigo.

— Y que harán ahora, ¿no piensan volver a la fiesta?

— Jeff, escúchame, - la voz de Mile resonaba ahora.

— Seguramente todos se van a preguntar dónde se han metido, ¿no crees?

— Estoy seguro de que P'Pond se la apañará muy bien sin mí y que los demás seguirán divirtiéndose, no nos necesitan – se justificó Mile.

Jeff observó el ambiente del festejo con aire divertido; por un lado, algunos de los chicos bailaban con tontos movimientos, en otro lugar la gente cantaba y charlaba, otros más ya contaban con menos ropa encima por los juegos que se les ocurrían. Parecía que nadie se había percatado de la ausencia de esos dos.

— Si quieres saber mi opinión...

— No, no la quiero saber – dijo Mile divertido del otro lado.

— Entonces, ¿para qué me llamaron?

Una carraspera casi inaudible resonó del otro lado del celular y la voz de Apo volvió a tomar su lugar.