Narra Sophia:
El amor es un sentimiento increíble cuando se es correspondido, cuando el amor se es forzado nada sale bien pero cuando se es paciente y se persevera puede ser como un sueño del cual no quieres despertar, todos amamos pero no todos somos correspondidos y está bien no sentir nada por esa persona, lo que si es malo es hacerle daño a las personas que te rodean o rodean a esa persona.
Peter y Lindsay son el claro ejemplo de ello, arriesgar todo con tal de acabar con el amor de dos personas que estaban destinadas a estar juntas por un capricho que les costó la vida.
-Estoy nerviosa.- le dije a mi hermano y a mi papá que se encontraban en la habitación.
-No puedo dejar de llorar.- dijo Stephen triste mientras soltaba lágrimas a chorros.
-Tus tatuajes son una farsa de chico malo al ver como lloras.- le dije y le di un golpe.
-Lloro por qué a mamá le hubiera gustado verte caminar al altar.- dijo limpiándose las lágrimas.
-Estoy feliz por ti hija.- dijo mi padre mirándome con los ojos llorosos.
-Estan más sentimentales que yo.- dije sonriendo y eso abren la puerta.
-Wow te vez increíble.- me dijo Rachel entrando con mi pequeña sobrina de 5 años.
-Te vez muy linda tía Sophi.- me dijo mi pequeña sobrina.
-El tío Bill está corriendo en círculos en la recepción.- me dijo y en eso sonreí ante tal confesión.
-Es que está muy nervioso.- dijo Rachel sonriendo.
-Es hora.- dije y ellos asistieron.
Me encontraba frente a la iglesia, las puertas se encontraban cerradas así que nadie podía verme, ahora sí los nervios me consumían y tenía ganas de vomitar, bastantes diría yo.
Mire al frente y suspiré ondo, mi hermano y mi padre me tenían sujeta en cada brazo y en eso abren las puertas, dejándome ver a todos los que me importaban.
Mi familia y la de Bill, la familia de mis amigas y la de los chicos y claramente mis amigas quienes eran mis damas de honor junto con Rachel, los chicos con sus respectivos hijos, por que si todas ya tenian hijos y el primero es ser padre fue nuestro querido y adorado Tom de dos lindas gemelas.
Y ahí estaba Bill llorando al verme caminar hacia el, es tan perfecto y diría yo que hasta el peor defecto le queda de maravilla.
-Te amo.- dijo en susurro
-Y yo a ti.- le respondí y el sonrió mientras limpiaba las lágrimas que salían de sus bellos ojos.
La boda estaba de maravilla yo ya había aceptado estar con el solo falta el.
-Hijo, es momento de que la unión entre Sophia y tú quede saldada.- dijo el padre y Bill asistió mientras yo lo miraba detenidamente.
-Bill Kaulitz, aceptas a Sophia Johnson como tú futura esposa para amarla y respetarla por el resto de tu vida, al igual que la bendición que lleva dentro de ella.- dijo el padre y entonces el me mira confundido.
-¿Es enserio?.- me preguntó y yo tome su mano para ponerla en mi vientre y sonreí.
-Tan enserio de lo que te imaginas.- le dije y entonces en empezó a saltar y a gritar, obviamente le había dicho al padre que le diera la noticia en el momentos de nuestra unión asi que eso hizo.
-¡¡Voy a ser papá!!.- grito y todos aplaudieron.
-Claro que acepto.- dijo poniendo mi anillo nuevamente.
-Ya puedes besar a la novia.- dijo y no dudo ni un segundo cuando nos besamos.
-Soy el hombre más feliz, te amo y te amare por siempre.- me dijo tocando mi vientre nuevamente.
-Y yo siempre te amare a ti aunque el amor conlleve dolor.- le dije y todos comenzaron aplaudir....
...FIN...
___________________Quiero agradecer a mis lectores que me motivan a seguir escribiendo, me gusta su opinión y sus comentarios en mis historias, cuento cada detalle que me dicen y tomo en cuenta cada pequeña cosa, la historia llega a su fin pero más historias vendrán y cada una será mejor que la otra
Esperen la siguiente historia titulada "Iguales pero diferentes "
Y por último pero no menos importante quiero darle las gracias a Mass_89 por aportar con nombres para mis historias❤️
Espero verlos muy pronto, gracias.
ESTÁS LEYENDO
El amor conlleva dolor
Hayran Kurgu-Me prometes que no seremos como nuestros padres.- me dijo mirándome fijamente -Te lo prometo.- le dije. °°° -Faltaste a tu promesa.- le dije mirándolo despectivamente. -No tuve otra opción.- me dijo intentando tomar mi mano a lo cual la quite con...