Jungkook Reactions

Parte 102

Tu turno (cap 1)

Para la vida de Park Jimin, ir al colegio significaba dos cosas específicas: aguantar maestros y aguantar compañeros. No había mucha ciencia en su día a día, pero su corazón anhelaba que algo; sin importar lo pequeño que fuera, sucediera en su vida.

Sus amigos eran interesantes, los llamaría amigos frente al resto de personas, pero muy dentro suyo sabía que debía cambiar su círculo social antes de meterse en más problemas. Lo que lo detenía era que, solamente con ellos, conseguía que la rutina no se sintiera como una carga pesada de todos los días. 

Vio el reloj de luces rojas y suspiró.

6:30am

Las clases empezaban en una hora y él seguía recostado cómodamente en su cama. Su habitación no tenía muchas cosas extravagantes por más que sus padres gozaban de una gran cuenta bancaria. Tenía su escritorio y su librero lleno de interesantes libros; todos relacionados con filosofía.

—Joven Park —llamaron a la puerta—, su desayuno está servido en el comedor.

Ante esas palabras contestó con un simple: «ya voy», antes de levantarse con pereza y meterse al baño.

Cada una de sus acciones eran lentas y perezosas pues el sueño todavía lo incitaba a regresar y envolverse entre las sábanas.

Cuando finalmente bajó al comedor el reloj marcaba las 7:00am.

—Su madre dejó el mensaje que estarían fuera por unos días. Dice que no puede utilizar el auto a menos que sea para ir al colegio. —Un joven del servicio fue el encargado de pasar el mensaje antes de retirarse.

Comió en silencio y emprendió su camino en el auto hasta aparcar en el colegio y encontrarse con sus amigos.

MinGyu, JiEun, Taehyung, Soyeon, Yugyeom, Jihyo, Jaehyun, Somi, Mina y él. Ese era el grupo más popular -entre palabras trilladas-. Tenían el mejor asiento en los recesos y siempre ocupaban los asientos del fondo en las clases.

Jimin se impresionaba de lo mucho que el ser humano se dejaba llevar por cosas tan insignificantes para inflar el ego y tomarse el derecho de tratar a los demás como si estos no fueran nada.

Todos eran lo mismo: hijos de grandes empresarios que no se esforzaban en lo más mínimo porque, al final de todo, heredarían la empresa familiar y todo lo tendrían asegurado. Precisamente por eso creían que aquellos cuyas cuentas eran pagadas por becas, no eran más que personas que habían nacido entre para esforzarse demasiado sin conseguir nada a cambio: personas que trabajarían para ellos porque no tenían cómo llegar a ser los jefes.

«Era ridículo», ese era el pensamiento constante de Jimin por más que su posición era completamente privilegiada. Le gustaba pensar que él no era como todos los niños de papi que lo rodeaban.

Pero sí, en resumen, ellos eran sus «amigos».

—Resulta que Jisoo comenzó a hablar con el novio de Yuna —contó Yugyeom.

—Pensé que ya habían terminado Yuna y Taemin —agregó Jimin mientras sacaba sus cosas del casillero—. Fueron curiosas dos semanas de rompimiento, nadie lo olvidaría.

—Sí, pero nadie se mete con una ex pareja de Yuna... es como suicidarse socialmente. —Ante el comentario de JiEun todo el grupo rió.

Yuna era rara según los ojos del resto, por esa razón todos los que se relacionaban con ella terminaban siendo raros también. Las mentes de los adolescentes funcionan de formas básicas para no entrar en crisis.

Al entrar en el salón todos tomaron sus respectivos asientos esperando entre alboroto y conversación a que la clase iniciara. Jimin se quedaba en silencio, siempre se quedaba en silencio, solo escuchando con atención.