Capítulo 21

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Todo era un caos, gente gritando asustada por todos lados, corriendo para resguardarse dentro del instituto

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Todo era un caos, gente gritando asustada por todos lados, corriendo para resguardarse dentro del instituto. Dejé a Stiles y Hayden ocupándose de curar a Liam, que estaba herido después del ataque de la Bestia.

Yo intentaba ayudar a la mayor cantidad de gente posible y encargarme de esa cosa. No sabía dónde estaban Scott, Kira ni Malia, pero seguí sin ellos.

Estaba en un pasillo desierto, solo una chica tirada en el suelo. Decidí ayudarla.

—Levanta, yo te ayudo —dije, mientras la levantaba.

La llevé a un aula cercana y cerré la puerta tras de mí. Olía esa Bestia; estaba justo aquí en los pasillos. Me apoyé en la puerta, haciendo presión para que nada entrara. Me giré para ver por el cristal de la puerta y no vi nada.

No hasta que golpes en la puerta me pusieron en alerta.

—¡Vete, sal por la ventana ahora! —grité mientras intentaba que no entrara.

La chica me hizo caso y salió corriendo. Intentaba aguantar todo lo que podía esa puerta, pero fue inútil porque la Bestia la rompió. Grité fuerte, sintiendo el terror invadir mi cuerpo. La Bestia, imponente y aterradora, se cernía sobre mí.

Gotas de sangre goteaban en el suelo y por toda mi cara

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Gotas de sangre goteaban en el suelo y por toda mi cara. Conseguí zafarme de esa cosa, pero me hirió bastante. Cojeaba debido al dolor en la pierna; me estaba curando, pero necesitaba sangre para recomponerme del todo, cosa que ahora, en estos momentos, no tenía.

Me adentré en la biblioteca, apoyándome en las mesas para recuperar el aliento. Sentí muchas respiraciones a mi alrededor y al girarme, pude ver a muchos adolescentes en el suelo, aterrados y algunos llorando. Mi cabeza daba muchas vueltas, intentando pensar con claridad, cosa que me costaba.

Me acordé de que en el piso de arriba había una puerta de emergencia.

—¡Id todos arriba! —ordené, con la voz firme, aunque mi respiración era pesada.

Analicé mi situación: la Bestia se acercaba, lo podía notar. Me puse recta, preparada para lo que venía.

Entró golpeando las puertas con fuerza y rugió tan alto que creo que todo Beacon Hills me escuchó. Le hice una señal con las manos para que viniera hacia mí; estaba preparada para pelear.

Doing all for love//Theo RaekenDonde viven las historias. Descúbrelo ahora