ᴘʀᴏᴠᴇʀʙɪᴏꜱ 9

405 71 15
                                    

"La diosa del amor, un dios de la Guerra y las hormonas de una mujer embarazada"

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

"La diosa del amor, un dios de la Guerra y las hormonas de una mujer embarazada"

El jabalí chillo y se lanzó contra los esqueletos por los aire con mucha fuerza. El jabalí se giró hacia ellos, Thalía alzó la Égida, pero Grover la detuvo.

—¡No lo mates!

El animal dio un gruñido y arañó el suelo listo para embestir.

—Si no lo hago—Dijo Thalía—Nos acabara.

—Es el Jabalí de Erimanto—Dijo Zoé—No creo que podamos matarlo.

—Concuerdo con Zoe—Susurre mirándolo maravillada—El único que pudo matarlo fue Heracles.

Zoé bufo pero asintió a mis palabras.

—¿Dónde estaría la diversión en eso? —Grito Percy asustado.

—Es un regalo—Dijo Grover—Una bendición.

—¡¿Una bendición?!

La bestia chillo y los embistió con sus colmillos, Zoé y Bianca se echaron de cabeza hacia un lado. Percy empujo a Grover para que no terminara aplastado por la bestia, Thalía me sostuvo del brazo alejandome del peligro, poniéndose delante de mí.

—¡Si, una bendición! —Grito Percy con sarcasmo—¡Dispérsense!

Corrimos hacia todas las direcciones y el jabalí se confundió.

—¡Quiere matarnos!

—Por supuesto—Respondió Grover—Es salvaje.

—¿Y dónde está la bendición? —Preguntó Bianca.

La bestia se tiró contra Bianca,fue más rápida y logró esquivarlo. El animal atacó con sus colmillos y logró pulverizar el cartel de bienvenida al pueblo.

—¡No os quedéis quietos!

Bianca y Zoé corrieron hacia una dirección opuesta, Grover comenzó a bailar alrededor del jabalí tocando sus flautas mientras el animal soltaba bufidos e intentaba cenárselo.

La bestia se giró hacia Percy y Thalía, me alejé de Thalia escondiéndome detrás de un árbol, vi como ambos corrieron hacia otra dirección siendo perseguidos por el animal, Grover corrió hacia ellos.

Pero no los seguí, me sostuve del árbol soltando un jadeo al sentir como mi cuerpo era azotado por un fuerte mareo, a los segundos sentí como Zoe me sostenía de los hombros con suavidad, mirando mi rostro.

—¿Qué sucedió? ¿Estás herida?

Bianca quitó una liga de su mano y agarró mi cabello en una cola algo desordenada, limpiando mi rostro de mi propio cabello.

—Solo es un mareo.

—¿Tienes idea de cuántos meses tienes?—preguntó Bianca con duda.

—Dos o tres.

ᴇɴᴛʀᴇ ᴅᴏꜱ ᴍᴜɴᴅᴏꜱ| ᴰⁱᵒⁿⁱˢⁱᵒ ᴰ'ᴼˡʸᵐᵖᵘˢDonde viven las historias. Descúbrelo ahora