⏳ CUARENTA Y SIETE ⏳

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Para Jimin no era fácil tomar una decisión como esa. Pasó diez años fuera de su hogar y en los últimos tres años apenas había visto a su padre dos o tres veces. Su relación era igual que siempre, pero por alguna razón no había regresado a su hogar, salvó aquella mañana lluviosa en que el cuerpo de su abuelo era velado en aquella lujosa capilla funeraria.

Pero ahí estaba; de pie delante de la maleta negra observando la ropa ya acomodada junto a su mochila con sus cosas más importantes.

—¿Estás seguro?

Jimin suspiró aún con las manos en la cintura observando su equipaje sin cerrar. Taehyung estaba a su lado con los brazos cruzados y una expresión extraña en el rostro. Se había ofrecido para hacerle compañía en el viaje pero desistió cuando Jimin le contó el verdadero motivo de su decisión. 

—Lo estoy —respondió. Se acercó a su maleta y la cerró para después voltear a ver a su mejor amigo.

—Estoy orgulloso de ti, mi vida.

—Gracias. No sé que voy a hacer ya estando allá, pero…

—Vas a buscar a ese ex traidor para hablar con él. Pero ésta vez le dirás todo lo que no le dijiste esa última vez, ¿está bien? —Jimin lo observó detenidamente—. No espero menos de ti.

Jimin sonrió con alivio, como si las palabras de Tae fueran esa gasolina que encendía los deseos de su corazón de derribar esos muros innecesarios entre él y Yoongi.

No tenía una jodida idea de que iba decir al momento de tenerlo frente a él (en caso de poder verlo), pero estaba seguro que lo que estaba haciendo era lo correcto.

—Voy a hacer lo que tengo que hacer —aseguró Jimin. Levantó su maleta y caminó siendo seguido por su mejor amigo—. Dejaré todo en manos de Nina y también en las tuyas. Si tienes que salir por trabajo no te preocupes, sé que mi ayudante estrella tendrá todo bajo control.

Taehyung asintió estando de acuerdo. Si había alguien en quien se podía confiar, era en Nina. Estaba completamente capacitada para estar al frente de la villa por unos días.

—Me llamarás, ¿verdad? Quiero saber todo en tiempo real, ¿okay?

—Eres un chismoso, ¿verdad?

Jimin se rio mientras negaba con diversión. Se despidió de Tae y también de Nina que alegó que era justo y necesario que se tomara un merecido descanso.

Justo al salir de Villa Esmeralda Seo Sunwoo apareció en la puerta. Vestía un traje gris y llevaba el saco en su brazo derecho. Todavía le resultaba extraño verlo así vestido en un lugar como ese, pero pensaba también que por su profesión era necesario algunas veces.

—Hola, Jimin —el pelinaranja le saludó también—. ¿Te vas de viaje? —Sunwoo dirigió su vista a la maleta y no fue difícil llegar a esa conclusión.

—Si. Asunto de negocios —respondió Jimin sin saber exactamente porqué. Sunwoo pareció conforme con la explicación.

—Que tengas buen viaje entonces. Cuando vuelvas te daré las buenas nuevas.

Jimin sonrió en despedida y se alejó dejando a Sunwoo aún con esa sonrisa plasmada en el rostro. Seguramente la editorial había aceptado la portada que él mismo había diseñado y esa era la noticia. Fuera como fuera, Jimin sabía que iba a lograrlo porque Seo Sunwoo tenía un gran talento.

Después De Ti [Yoonmin]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora