Después De Ti [Yoonmin]

⏳ TREINTA ⏳

Jimin despertó en su cama pero no estaba solo. A su lado estaba su mejor amigo con el ojo medio abierto y la baba decorando su almohada. Olían a alcohol, a confesiones vergonzosas y a resaca.

Se estiró con cuidado de no despertar al borracho a su lado y fue directo al baño a lavarse los dientes para quitar el sabor amargo de su boca, inmediatamente después entró a tomar una ducha larga que lo despabilara por completo pues tenía un día difícil de trabajo.

Después de vestirse con su ropa más cómoda salió hacia la cocina para prepararse un café doblemente cargado. Lo necesitaba tanto como el oxígeno para funcionar.

—Yo también quiero —Taehyung apareció por la puerta de la cocina con cara de zombie—. Me siento jodidamente horrible. Y no hablo del físico, yo soy guapo hasta vomitado, pero si me duele mucho la cabeza —se quejó. Jimin sonrió entendiendo a la perfección como se sentía.

—Pensé que dormirías hasta tarde —expuso Jimin.

—Tengo cosas que hacer —reveló con una pizca de emoción en la mirada.

La noche anterior hablaron de muchas cosas. Taehyung admitió frente a su amigo que estaba saliendo con una preciosa modelo que conoció en la última sesión de fotografías y era ella precisamente el motivo de sus sonrisas al teléfono. Dijo estar realmente interesado en ella, que estaba dispuesto a asumir el riesgo de una relación a distancia porque viajaba casi tanto como su amigo. Jimin lo felicitó y no evitó sentirse tranquilo al saberlo, y de paso entendió la razón de la nueva amistad entre su mejor amigo y Jungkook.

Conforme recordaba la plática su sonrisa fue desapareciendo poco a poco. En esa larga plática también habló de su sentir y lo patético que se sentía pensando en Yoongi. El hombre estaba de vuelta en su vida, su misma rutina, sin preocuparse de nada a su alrededor. Así lo recordaba. Así había sido siempre. A Jimin le molestaba estar prestando demasiada atención en él sabiendo que debía borrar su existencia de su cabeza.

Pero era imposible.

—Hoy vuelve la bruja esa con toda su comitiva —soltó para Taehyung. Este le vio con curiosidad.

—¿Por qué no dices que vuelve el traidor?

—Porque ese traidor no vendrá aquí, se irá a buscar otro lugar, ¿ya se te olvidó? —le cuestionó con molestia.

—Oye, cálmate mi vida, te va a caer mal el cafecito —sonrió burlón y el otro le miró con más enojo todavía.

—No debí decirte nada anoche.

—Estabas muy borracho y hablarlo era precisamente lo que querías. No lo habrías evitado aunque te lo hubiera pedido.

—Pues no eres de mucha ayuda. ¿De qué lado estás? —se recargó sobre la encimera viéndolo, juzgándolo. Taehyung se acercó a él y le dio un abrazo perezoso.

—Por supuesto que de tu lado, vida mía. ¿Ya te dije que estoy dispuesto a amarrarlo y subirlo a un avión a Hawaii para que no se acerque a ti si no quieres? —Jimin soltó una carcajada suave.

—¿Es castigo o premio? —preguntó con gracia—. Mejor vámonos tu y yo de vacaciones, genio.

—¿Es eso una propuesta? —indagó separándose del cuerpo de su amigo—, porque si es así puedo organizar un viaje en fa —tronó los dedos—. Tu solo di cuando quieres irte y huimos juntos como dos enamorados que no pueden estar juntos porque sus familias se oponen.

—¿Has pensando en ser escritor? Porque te inventas unas historias bien locas y bien rápido —dio un sorbo a su café y avanzó a la puerta tomando sus cosas de la mesita al lado.