El corazón del villano [2]

Capítulo 2

Exel Ortiz

Ya comenzaron la reconstrucción de mi antigua castillo, el que fue quemado por las hadas, en estos momentos estoy quedándome permanente en el otro, el que está muy muy lejos del pueblo, detrás de la montaña, donde solo hay suelos negros, sin plantas.

Acaba de llegar el periódico del reino de los hechiceros. Tengo ganas de enseñárselo a la niña, a la maldita mocosa con alas.

Este periódico es una joyita, la terminará de destruir por completo.

"NOTICIA DE ÚLTIMA HORA

El rey Zyker VII Naftaest acaba de anunciar que está comprometido con la joven Cassia Nerses. Una parte del pueblo está decepcionada, ya que todos pensamos que se casaría con la salvadora Afra Tuedelaff con la que tuvo un cortejo anteriormente.

Se dice que el rey tuvo una relación con la joven desde la adolescencia y tuvieron que romperla por cuestiones políticas. Pero años después el rey Zyker se dió cuenta de que su corazón le seguía perteneciendo, por esas razones han retomado la relación. Ya sabemos quién será nuestra futura reina.

Palabras del rey Zyker VII:

«Desde muy pequeño la belleza cautivadora de Cassia me atrajo, amo su forma de ser y me encanta la mujer que tengo y no la cambiaría por nada del mundo.

Nunca tuve una relación con la dama Afra Tuedelaff, nuestra relación siempre fue profesional, solo fue mi consejera política del momento, le agradezco por ayudarme. Pero nunca tuve ni tendré nada con ella.

Con la mujer que tengo a mi lado no necesitaría más nada.»

La otra parte del pueblo está muy alegre de la futura pareja, están ansiosos, tienen anhelo de tener una reina después de casi tres siglos.

El rey parece ser el hombre más feliz de la dimensión, eso es todo lo que necesita nuestro pueblo.

Reino de los hechiceros
12/marzo/800.000.883 después de la creación de la dimensión"

Lo mejor de todo es que traía una foto donde Zyker se besaba con mi cuñadita.

Quiero ver la reacción de la mocosa, quiero ver cómo llora y llora sin parar. Se ha vuelto una adicta al verde y se que lo peor para ella en estos momentos es no probarlo.

En un bolsillo llevo el polvo de hadas, en otro la jeringa con el verde y de mi cuello cuelga un collar de naftalina. Sé que es muy peligrosa cuando sus poderes están activos, se que puede descontrolarse, pero dudo que eso suceda, está hecha cenizas.

Llegué a las celdas, el olor a estiércol estaba por todas partes, siempre he querido mantener la celda de la mocosa limpia, no me gusta oler nada que venga de ella.

Los guardias se reían y al ver mi querida presencia se quedaron rectos uniendo las piernas.

Acomodé los guantes negros en mis manos y la capa en mis hombros.

Abrí la celda de la niñita y la vi, sonriendo, alegre por obtener su dosis de verde.

—¿Cuándo me vas a matar? ¿Cuándo saldré de aquí?—soltó una risita para si misma. Mi cara de aburrimiento destacaba.

—Tengo una noticia buena y una mala—hablé con voz neutra.

—¿Y bien?—preguntó. Estaba arrodillada, sus brazos flacuchos estirados por las cadenas. Todavía tenía esas marcas en el cuello, cuando gritó que quería morir.