Death Note New Beginning

Capitulo 1

Mundo Shinigami

En el reino sombrío de los shinigamis, un grupo de seres etéreos se congregaba bajo la luz del trono. Los murmullos de expectativa llenaban el aire, y una atmósfera de anticipación se palpaba en el ambiente.

-¿Oíste lo que va a anunciar el rey? -preguntó un shinigami a otro, su voz teñida de curiosidad.

-No, ¿qué es? -respondió el segundo, con un matiz de intriga en sus palabras.

-Tampoco sé qué van a anunciar, pero supongo que será interesante. ¿Eh? -dijo el primero, mirando a su alrededor.

-¿Qué pasa? -preguntó otro shinigami, notando la conversación.

-Es Raito -murmuró, señalando a un shinigami que permanecía sentado con un aire de indiferencia.

-Oye, Raito, ¿escuchaste lo que el rey va a anunciar? -le preguntó uno de ellos.

-No, ¿qué es? -replicó Raito, sin apartar la vista del suelo.

-Bueno, no lo sabemos todavía, pero no falta mucho para que den el anuncio -respondió el shinigami.

-Bueno, igual no importa. Sé que permaneceré en este aburrido lugar hasta que un día deje de extender mi vida y desaparezca -dijo Raito con un tono de resignación.

-¿Tan aburrido estás? Y yo que pensé que no te aburrías tan rápido desde que llegaste aquí -dijo otro shinigami, con un tono de sorpresa.

-Llegué aquí hace mucho, mucho pero mucho tiempo, ¿o acaso no lo recuerdas? -contestó Raito, mirando al otro con desdén.

-Ah, sí, claro -respondió el shinigami con una risa nerviosa.

-¡Miren, ya está comenzando! -exclamó uno, acercándose hacia la luz del trono. -¿Raito, no vienes?

-No dudo mucho que lo que sea que anuncien me quite el aburrimiento -respondió Raito con un encogimiento de hombros.

-Como digas -dijo el shinigami, mientras se dirigía hacia la luz.

El rey shinigami se alzó en su trono, su presencia imponente llenando la sala. Con una voz resonante, comenzó a hablar.

-He tomado una decisión. He decidido enviar Death Notes al mundo humano.

Un murmullo de sorpresa recorrió la sala.

-¡En serio! -exclamó un shinigami, perplejo.

-¿Pero, por qué? -preguntó otro, con una expresión de desconcierto.

-¿Esto está permitido? -se preguntó un tercero, su voz temblando con incertidumbre.

-¡Silencio! -ordenó el rey con autoridad. -Yo ya he tomado una decisión. Enviaré a seis shinigamis al mundo humano. ¿Quién irá al mundo de los humanos lo decidiré en la siguiente hora. Cuando me haya decidido, volveré para dar mi respuesta -dijo mientras la luz se disipaba.

-Mmmmm, me pregunto quiénes irán al mundo humano -dijo un shinigami, riendo de manera burlona. -¿Escuchaste eso, Raito? ¿Eh? Y Raito... mmmm, parece que se fue.

Raito permaneció inmóvil, sus pensamientos sumidos en la apatía.

-Enviar Death Notes al mundo humano es una pérdida de tiempo -pensó Raito con desdén. -Me pregunto por qué ha tomado esa decisión.

Un tiempo después, Raito observó a otro shinigami que estaba a punto de partir al mundo humano con una Death Note en mano.

-¿¡Por qué a mí, si los humanos son lo peor!? -exclamó el shinigami, visiblemente frustrado.