Rivalidad -

Capítulo 24: Bajo Presión

El sol ya se había puesto, dejando un cielo oscuro salpicado de estrellas. En el paddock, el bullicio de la carrera había dado paso a un ambiente más tenso, donde el eco de las palabras de Richard Savre seguía resonando. Stefania y Luca se habían alejado, pero las chispas del enfrentamiento seguían ardiendo.

**En el coche de Stefania**

Stefania se acomodó en el asiento del conductor, su corazón aún acelerado por la confrontación. Luca, que ocupaba el asiento del pasajero, la miraba con una mezcla de preocupación y admiración.

"¿Estás bien?" preguntó Luca, rompiendo el silencio.

"Sí, solo... necesito canalizar toda esta energía," respondió Stefania, ajustando el volante como si se preparara para una carrera. "No puedo permitir que Richard me intimide."

Luca suspiró. "No se trata solo de él. También es Danielle. Tienes que tener cuidado, Stefania. Ella no es solo una rival; es su hija, y eso significa que hay mucho en juego."

Stefania giró la cabeza para mirar a su hermano, sus ojos ardían con determinación. "No voy a darme por vencida. La única forma de demostrar que soy más que una novata es enfrentándome a ella, sin importar lo que diga su padre."

**Mientras tanto, en el coche de Danielle**

Danielle se sentó en el auto, las manos firmemente en el volante. A su lado, su padre seguía hablando, aunque su voz parecía distante en su mente.

"¡No puedo creer que te hayas dejado influenciar por ella!" Richard exclamó, furioso. "Esa chica es una distracción. Necesitas concentrarte en ganar."

"¡Papá, basta!" gritó Danielle, su voz resonando en el interior del vehículo. "No puedo seguir haciendo lo que tú quieres todo el tiempo. No soy una marioneta."

Richard se quedó en silencio, sorprendido por la audacia de su hija. "¿Qué estás diciendo?"

"Estoy diciendo que no sé si puedo confiar en ti o en tus decisiones. Tal vez es hora de que empiece a tomar mis propias decisiones," replicó Danielle, con una mezcla de desafío y vulnerabilidad en su tono.

**Encuentro Casual en el Paddock**

Un rato después, mientras los equipos comenzaban a desmantelar los coches, Danielle salió de su auto. Se encontró de nuevo con Stefania, quien estaba a unos pasos, hablando con un miembro de su equipo. Las miradas se cruzaron, y la tensión era innegable.

"¿Sigues pensando que soy una novata?" Stefania preguntó, con una sonrisa arrogante.

Danielle se acercó, su mirada ardía. "No necesito que me subestimes para demostrar lo que soy capaz. Pero no te engañes; esto no es solo una carrera para mí. Es mi vida."

Stefania alzó una ceja, sintiendo cómo la adrenalina volvía a fluir por sus venas. "Entonces, ¿estás dispuesta a arriesgarlo todo? Porque yo lo estoy. No me detendré hasta que me demuestres que eres más que la hija del poderoso Savre."

Danielle sintió un escalofrío recorrer su espalda. "No necesito demostrar nada a nadie. Solo quiero ganar."

"Entonces prepárate, porque estoy aquí para arrebatarte esa corona," respondió Stefania, con una sonrisa desafiante.

**Reflexiones de Danielle**

Mientras se alejaba, Danielle luchaba contra la confusión que sentía. Sabía que había algo en Stefania que la atraía, pero también sabía que no podía permitir que eso la distrajera. "Soy la reina," se repetía, tratando de reafirmar su posición. "No dejaré que nadie me detenga."

**Reflexiones de Stefania**

Por su parte, Stefania se sintió satisfecha al ver la chispa en los ojos de Danielle. "Esto es solo el principio," pensó mientras se alejaba con Luca. La competencia no solo era sobre carreras, era un juego de estrategia y emoción.

**Cierre del Capítulo**

Ambas chicas estaban decididas a no dejarse vencer. Con cada encuentro, la línea entre rivalidad y atracción se volvía más difusa, y cada carrera se convertía en un desafío no solo de habilidad, sino también de corazón. La batalla estaba lejos de terminar, y cada una sabía que tendría que enfrentarse a sus propios demonios para salir victoriosa.