Toco un par de veces la puerta de su departamento. Es la primera vez que entro y utilizo la puerta de la manera adecuada, capaz de la manera a la que ella le gustaría. Vuelvo a tocar, nadie abrio todavía. ¿Estará? Claro que sí... son más de las ocho...
Entonces, siento que sigilosamente me abre la puerta. Y siento además, como quita los miles de seguros que traia..- Hola... - la saludo. Pero Gabriela no responde. – tenía muchas ganas de verte... - cuanto me cuesta decir este tipo de cosas. Pero con ella, solo fluyen.
- ¿Qué haces aca? – me pregunta fría.
- Te dije... tenía muchas ganas de verte. – abro un poco más la puerta de su departamento con las manos para poder entrar y la abrazo, haciendo que sus pies dejen de tocar el suelo. Acomodo mis manos en sus caderas y le beso la nariz rápidamente. La puerta se cierra sola. - ¿estás bien?
- Me sacaron el trabajo. – susurra. Su mandíbula empieza a temblar. Y reconozco muy bien el matiz de sus ojos. Pocos días... y me he convertido un experto en ella...
- ¿por qué?
- No sé. – sus manos toman mis brazos y hacen que los baje de sus caderas. Me abstengo. Lo hago. Siempre le hago caso y ahora no será la excepción. – mi jefe fue golpeado brutalmente por alguien que quería que yo recuperara el trabajo cuando no lo tenía. – me mira. Está buscando respuestas y está logrando ponerme nervioso. – hoy... después de días de recuperación, por fin pudo caminar y venir a decirme que nunca más trabajaré en ese puto banco. – cierra los ojos y deja escapar algunas lágrimas. - ¿por qué Fede?
- Te puedo explicar lo que pasó...
- Max está en el hospital. – sigue. Me tiene atrapado. Trago saliva y veo como una lágrima le adorna las mejillas. Y ahí va otra. - ¿se puede saber quién te dijo que podes meterte en mi vida de esta forma?
- Quería defenderte, eso es todo.
- ¿Golpeándolo? – grita. Endurezco la mandíbula y evito que su mirada me debilite más.
- Yo no quería...
- ¿Vos no querias qué? ¿Meterme en esto? ¿joderme más de lo que ya estaba sin vos?
Me quedo callado. Eso dolio mas que un golpe en la mandibula. Más de lo que yo pude dar en años. Y ella lo maneja en palabras que golpean fuerte... más fuerte que yo.
- Las cosas no son así ¿sabes?
- ¿Y cómo van las cosas con vos Federico? – busca mis ojos y yo hago que se encuentren con los suyos. Nos miramos. Quiero besarla. Quiero quitarla ese enojo a base de caricias. Me pone. Me encanta. Es preciosa. - ¿Quien sos y por qué queres manejar mi vida de esta forma?
- Yo no quiero manejarte.
- Estás haciendo que todo se salga de control.
- Dijiste que necesitabas ese trabajo...yo solo...
- ¿Vos que? – grita de nuevo.
De sus ojos empiezan a brotar innumerables lágrimas. No sabe cómo mirarme. No sabe si quiera puede hacerlo. Se tapa la cara y camina de un lado para otro.
- Y ahora tengo que conseguir un abogado ¿sabes? Me denunciaron.
Abro los ojos. ¿De qué otra manera puedo arruinar más la vida de alguien que en verdad empezo a importarme? ¿De qué otra manera no puedo dejar de un problema para todos? Es ir. Aparecer. Y dejar una pequeña huella en cada persona que conozco.
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TENTATION | TOSCALIA
ActionJamas pensó que enamorarse, le costaría tan caro. ADAPTADA Derechos de autor a: @SKYNOTHELIMIT