─Ven, siéntate conmigo.
─Bonita fiesta.
─Es el cumple de mi papá, pero ¿cómo es que usted-
─Resulta que la amiga que no he visto en mucho tiempo, es tu hermana.
─Carla, pero vaya sorpresa, el destino nos une aún más ─su profesora asintió un tanto nerviosa.
─Estábamos conversando y de pronto tu hermana me hablo de ti, al principio pensé que no hablaba de la misma persona hasta que menciono tu buen gusto por el dibujo. Al final me invito a la fiesta y acepte. Me sorprende ver a gente vestir muy elegante, admito que me siento un poco incomoda. No estoy acostumbrada a estar en festejos así.
─Créeme te entiendo. Imaginé algo más sencillo ─se quedó en silencio mirando el rostro de su profesora. Luego sus labios─. Qué bueno que está aquí.
─Me ha encantado tu discurso.
─No puede ser ¿lo escuchaste? ─sonrió avergonzado.
─Si, no tiene nada de malo, fue muy bonito lo que dijiste.
Se quedaron un instante en silencio viéndose el uno al otro. Bruno tomó su mano, intentó entrelazarla, pero tan pronto vio a su hermana su profesora la retiro bruscamente.
─Te he estado buscando.
─Lo siento, Carla, tenía que hablar con tu hermano.
Su hermana se sentó en medio de los dos.
─Ya me lo imagino, tareas. Sarah me ha hablado muy bien de ti.
Bruno asintió, quería estar a solas con ella sin que y que nadie los molestara.
─Siempre he sido inteligente, hermanita.
─Que presumido me saliste ─cuando se levantó tomo a su profesora por el brazo─. Hay unos amigos que quiero presentarte, son muy guapos, tal vez consigas novio esta noche amiga.
─Tal vez luego.
─Está bien, tú te lo pierdes.
─Puedes ir con ella ─dijo cuándo su hermana se había marchado, sentía ese hilo de celos que se enredaban en sus pensamientos─. Ve y conoce a esos chicos guapos.
─No te pongas así, no iré.
Llevo una mano hacia la suya y esta vez la entrelazo con discreción.
─¿Ya te dije que te ves bellísima en ese vestido?
─Eres exagerado, pero gracias.
Le dio un apretón y después le sonrió.
Permanecieron juntos como dos tontos que se enamoran por primera vez hasta que el momento fue arruinado por la presencia de Claudia. Su profesora se alejó dejándolos solos, Bruno no podía hacer nada para retenerla en ese momento.
Después de la media noche despidieron a todos los invitados. Entre ellos su amada profesora. Aprovechó que sus padres estaban distraídos para darle un ligero beso en los labios, le guiño el ojo y le susurro:
─Hasta luego, Profa.
Las clases ya no volvieron a hacer las mismas, Bruno le dedicaba ciertas miradas a su profesora, ella solo sonría disimuladamente. La vio levantarse de su asiento mientras todos estaban ocupados leyendo un libro de química VI, caminó hasta él y le entrego una pequeña nota.
"No me mires así, me incomoda. Besos"
Era ya normal suspirar por ella. Su voz suave, al igual que sus labios, lo habían hechizado demasiado pronto. Más de lo usual.
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A pesar del tiempo ©
Romance«Si tan solo pudieses verme como algo más que un alumno » «Si supieras lo que haces sentir cada vez que te veo» «Es un hecho estoy enamorado de ti, Profesora» Mientras más pasan los días más crece la atracción por aquella mujer. Bruno jamás imaginó...