Parte 13

1.6K 113 50
                                    

Llegaron al restaurant a las nueve y cuarto, Bruno había hecho las reservaciones un día antes. Entraron tomados de la mano mientras acaparaban las miradas de algunos curiosos.

Cenaban cómodamente, a lado de ella la pasaba de maravilla, pero aquello cambió cuando un hombre desconocido se sentó en su mesa sin permiso. De inmediato los celos llegaron, además no dejaba de mirarla.

─Hola, no pude evitar tal belleza. Porque no dejas a tu hermano y vienes conmigo ─Bruno lo encaró, tenso la mandíbula, estaba a punto de levantarse, pero Sarah se lo impidió.

─Lo siento, estoy cenando con mi novio.

─¿Él es tu novio? ─el hombre volteo para mirarlo de reojo.

─Sí. Así que vete por donde viniste.

─Menos mal que se fue ─Bruno suspiró liberando su tensión─, estaba por sacarlo de nuestra mesa.

─No es para tanto.

─Dejando a un lado eso, mis padres tienen una cabaña en Toluca, podríamos pasar el fin de semana juntos.

─Por supuesto, acepto. Hay que compensar el tiempo perdido.

─Y recuperar algo más ¿no crees?

─Pervertido ─le susurró.

─La universidad me consume, y ya casi no nos vemos, quiero estar contigo.

Tomó su mano, beso sus nudillo y luego sus tiernos labios.

─Me siento incomoda, Bruno. No debí de haber venido.

─Quiero que conozcas a mis amigos. Son geniales, ellos saben de ti.

─Pero cuando me vean pensarán que soy una anciana, es una fiesta de universitarios.

La tomó de la mano.

─Si te tratan mal nos iremos.

─Bruno

La puerta se abrió y una chica los recibió, le dio un beso en la mejilla y los invito a pasar.

─Pensé que no vendrías ─la escucho decir─, vengan los demás están en el patio.

Atravesaron la pequeña sala, sentía como Sarah se aferraba a su mano, tenía tal vez un poco de pena o pánico de que la vieran con él.

─Chicos, Bruno está aquí.

Todos voltearon hacia él. Había cuatro personas sentados en la mesa. Y todos se fijaron en Sarah.

─Siéntense.

─¿Ella es tu novia?

─Sí ─dijo Bruno con mucha naturalidad y orgullo─. Sarah, ellos son mis amigos, somos algo así como los nerd de la clase.

─Los cerebritos ─corrigió uno de los chicos.

─Él es Alejandro ─el chico tenía una cicatriz en la barbilla─, Ella es Laura ─la chica de lentes redondos─, Kenia ─de piel morena con brackets en su sonrisa─, Gaspar ─tenía ese aire intelectual─, y ella es Anna ─era la chica que les había abierto la puerta hace un momento.

─Mucho gusto a todos, perdonen que haya venido sin invitación.

─No para nada ─Anna le indicó que tomara asiento, pero parecía estudiarla más de lo usual─. Bruno nos ha hablado de ti, y la verdad yo tenía tantas ganas de conocerte.

─Yo también ─dijo Laura.

─Todos ─comentó Gaspar tomando la carne para hamburguesa de la mesa.

A pesar del tiempo ©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora