Lo que nunca imaginaste || Tom Kaulitz

Capítulo 14

Me cagué mentalmente en quien fuera por molestarme en ese momento... Saqué el móvil del bolsillo.
Tom: ¿quién es?
Miré la pantalla.
Yo: Kim...
[
Kim: ¿¡dónde estás?! ¡Llevo llamándote desde la 1 chiquilla! ¡me tienes que contar TODO!
Yo: Kim, cariño, estoy... ocupada...
Kim: serás guarra! ¿sigues con Tom?
Yo: emm sí.
]
Bill bajó corriendo las escaleras.
Bill: ¡anda! Si no os estáis succionando el uno al otro.
Tom le miró con cara de ¿qué me estás contando?
Yo: calla calla, que es Kim.
Bill: ¡dile que se venga! Que estoy solo...
[
Yo: Kim, eyy! Dice Bill que si te vienes.
Kim: emm... no séee.
Yo: así te lo cuento TODO.
Kim: en 5 minutos estoy allí.
Me reí y colgué el teléfono.
Yo: ya viene-le dije a Bill.
Tom: vale. Perfecto. Ale Bill, fus fus. Vete.
Bill resopló y se tumbó en el sofá.
Bill: es MI casa. MI salón. Si quieres tirártela vete a TU habitación.
Yo: jodér Bill, eres un amor.
Bill: no, si no lo digo por ti... es que Tom es un acaparador. Te quiere a ti, el salón TODO. Y no hay que darle caprichos.
Tom: Bill, desvarías. Vete al médico.
Bill fue a replicar, pero Tom le calló con la mano mirándome a mí a la cara. Nos sonreímos y me acerqué a él.
Mientras nos besábamos me puse encima suya. Mitad porque quería, mitad obligada por Tom.
Puse ambas manos en su cuello, entrelazando mis dedos en sus rastas y él las puse en mi espalda.
Bill: Oye, joder... qué me da vergüenza y tal estar yo aquí como un gilipollas.
Tom se separó y se hizo a un lado para mirarle.
Tom: pues te vas.
A mí todo eso me daba vergüenza, pero a Tom se la sudaba.
Bill: tío macho, es el salón... no me parece normal lo vuestro.
Tom: es nuestro primer día, y nos tenemos ganas. Así que chitón.
Levanté ambas cejas y le sonreí.
Bill: es que si fuera solo un beso... pero no...
Tom: que te calles-dijo y acto seguido me besó.
Bill: pues voy a llamar a los chicos... a ver si así se os pasa la tontería.
Cogió el teléfono y les llamó.
Bill: en nada están aquí.
Tom hizo un sonido que retumbó por toda mi cabeza, lo que hizo que me riera y tuviéramos que separarnos.
Llamaron a la puerta.
Yo: ¡yo abro!-aparté a Bill que se dirigía a la puerta.
Bill: valee...
Abrí la puerta rápidamente.
Kim: ¡cuéntamelo todo!-se giró a un lado-em, Bill, Tom... hola-saludó con la cabeza-me hago pis... me acompañas?
Me reí por su tan buena e improvisada excusa.
Tom: mira Kim, te ahorro el trayecto al baño y la intriga. Estamos saliendo.
Cogió el mando de la tele y cambió de canal a uno de series.
Kim: pero es que Tom, a ver... tú me dices eso, ella me lo cuenta TODO con detalle. Me quedo con Alkjis.
Tom: ¡qué se dice ALCRIS hostia!
Yo: sosiega chaval.
Me apoyé en el respaldo y agaché mi cabeza hasta su altura.
Le di un beso en la mejilla y bajé al cuello. Entonces alguien me cogió por las piernas y me empujó, lo que provocó que acabara en el suelo gritando.
Yo: Bill me cago en toda tu estampa!
Tom: joder Bill! Eres un animal, se podría haber roto el cuello.
Se agachó a mi lado y me puso la mano en la mejilla, sonriéndome. Creí morir ante ese gesto.
Bill: nahh, que ahora se preocupa por ella y todo Kim-ésta se rió.
Tom: cállate ya, y abre la puerta que estoy viendo llegar a Andreas.
Me levantó del suelo y me cogió por la cintura. Me puse de puntillas y le besé.
Andreas: joder, yo también quiero... Alkjis me das un besín?
Tom se separó.
Tom: ¡ A VER, QUE SE DICE AL-CRRRRRRIS! No es taaan difícil de decir.
Andreas se quedó con cara de acojonao...
Yo: no pasa nada, es un nombre chungo Andreas, lo sé. Perdónale, está estresao.
Andreas: joder sí, se nota.
Tom: pues tú sabes que hacer para desestresarme-me susurró.
Sonreí.
Yo: es que ahora mismo todos nos miran.
Se dio la vuelta y se encontró con 3 pares de ojos expectantes que se dieron la vuelta haciendo que estaban ocupados.
Bill: si bueno ¿qué me decías Kim?
Kim: naada, que me gusta tu pelo.
Andreas: si y yo tengo un rinoceronte.
Todos le miramos y estallamos en risas.
Andreas: ¿qué pasa? Es una expresión!
Gustav y Georg no tardaron en llegar, y estuvimos toda la tarde de risas haciendo el tonto. Ellos se pasaron todo el rato soñando sobre cuanto llegarían de alto.
Llegamos al instituto y Tom y yo íbamos de la mano. Ambos íbamos con una sonrisa despampanante en la cara y Bill también, aunque no sabía por qué. Muchos nos miraban y cuando me di cuenta de que la mayoría de sus fans eran chicas, que soñaban ya con ellos, supe que eso no sería bueno para su carrera e intenté soltar nuestras manos pero Tom no me dejó y me miró acusadoramente. Bill se fue a su clase y nosotros entramos en la nuestra. Nos sentamos juntos al final, como siempre, y empezamos a tontear y tal. Todos nos miraban asombrados y algunas chicas a mí con celos. Si ya antes soñaban con Tom, ahora que era "famoso" o empezaba a serlo sería...
Fueron pasando los días y cada vez Tokio Hotel lo tenía más chungo en clase, les hacían miles de fotos que paraban a Internet en las cuales yo salía repetidas veces. Tom y Bill estaban hartos. No podían ir al baño sin que las chicas fuesen corriendo detrás suya. Gustav y Georg pasaban algo así, pero con menos calvario... yo me ponía celosa al ver como las chicas intentaban sobar a Tom, pero cuando veía que el me miraba a mí y me cogía de la mano me daba cuenta de cuánto le quería.
Había pasado un mes desde que salió DDM y eso era insoportable. Un día estábamos en los baños Tom y yo escondidos esperando a que se fuera la gente del instituto para poder salir tranquilamente. Aprovechábamos el tiempo tonteando, enrollándonos y haciendo tonterías. En esos momentos en los que el tiempo pasaba rapidísimo, en los que solo existíamos él y yo,
me daba cuenta de lo que le quería. En poco tiempo haríamos un mes.
Estaba contándole la última movida de mi hermana pequeña cuando de repente le cambió la cara, dejó de sonreír y miró al suelo. Yo me temí lo peor.
Tom: tengo que decirte una cosa...