Capítulo 27

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 Yo: sí mamá estaré bien. En cuanto lleguemos te llamo ¿vale?-la abracé.
Mamá: solo tienes 18 años...
Yo: y muchas puertas abiertas...
Papá: aunque no lo creas, estamos muy orgullosos de ti.
Cogió a mi madre por los hombros... estaba llorando.
Siempre montando escenitas.
Aunque por suerte no era la única. Los padres de Kim estaban por el estilo y la madre de Andreas también.
Mamá: llámame todos los días. Cuando tengas la plaza también. Y cuando te vayas a acostar... y cuando.
Yo: sí claro-la interrumpí-¿Cuándo cague también? Mamá que tengo 18 años. Déjame vivir la vida.
Mamá: te voy a echar de menos...
Yo: mamá que no me voy a la guerra...
Mamá: aún así...
Tras muuuchos abrazos, muchas despedidas y muchas lágrimas por parte de las madres nos montamos en el tren.
Andreas: ouh Yeah. Berlín chicas BERLÍN!-Kim y yo gritamos-mi madre me ha hecho prometerle 23245354 veces que no haremos una fiesta según lleguemos...
Kim: ¿fiesta que haremos según lleguemos? ¿No?
Yo: fiesta que haríamos si conociéramos a alguien.
Kim: es verdad. Estamos marginaos nenes.
Me reí.
Yo: ¿cuándo vienen?
Andreas: ¿quién?-le hice un gesto con las cejas-ah... en unos días. Nos llamarán para ver cómo está la casa y tal...
Yo: vaaaaaaale.
Kim: ¿por qué no le dices a Tom lo que te pasa con él?
Yo: ¿por qué? No quiero que me pueda engañar.
Kim: ¿cómo?
Yo: si se lo digo se inventará cualquier excusa idiota pero que para mí será válida... y pasará lo que no quiero que pase. Oh, es el gran Tom... el Kaulitz el tío que se tira a todo. ¿Por qué iba a ser yo diferente a las demás?
Kim: porque Tom no quiso a las demás.
Yo: ahí le has dado. Tom dijo que nunca había querido a nadie. Fue todo una farsa Kim...
Kim: ¿y si la farsa fuera lo que dijo? ¿Si fuera puro marketing?
Yo: NO. Y aunque lo fuera... ¿qué iba a cambiar eso? Sí cambiaría el hecho de que me haría ilusiones para nada... para que haya como mucho otra noche y se vaya con la primera siliconosa que vea...
Andreas se empezó a descojonar.
Yo: ¿qué?-enfadada.
Andreas: ¿siliconosa?-entre risas.
Puse los ojos en blanco.
Kim: a ver Alkjis... por lo menos deberías hablar con él creo yo...
Yo: no no y NO.
Andreas: vas a acabar hablando con él. Cuanto más tarde sea más duro será... tú decides...
Yo: joder no. No quiero. Lo pasé muy mal y lo sabéis. No quiero volver a pasar por eso...
No podía volver a hacerme ilusiones. El primer año que se pasó de gira estuve mirando por la ventana a todas horas pensando en que vendría con una rosa sonriendo y se pondría debajo de mi ventana... soñé despierta tantas veces en que me volvía a fundir en sus brazos... no puede pasarme esto a mí.
No quiero... joder joder NO.
Mientras pensaba en todas esas movidas me quedé sopa.
****: Alcris, Alcris despierta.
Yo: ¿qué?
Abrí los ojos.
Oh.
Tom.
Yo: ¿qué haces aquí?
Tom: ¿no te acuerdas? Te dije que vendría a por ti como un ángel... y entonces volaríamos juntos muy lejos de aquí. Cumplo mis promesas.
Yo: pero yo pensaba que no me querías...
Tom: blasfemias.
Yo: pero...
Tom: calla... no digas nada.
Me abrazó.
Me levanté sobresaltada.
Andreas: ¿estás bien?
Yo: eh sí... estaba soñando...
Andreas: ¿Tom?
Yo: sí... no quiero hablar de ello.
Se limitó a asentir y volver a ponerse los cascos.
Kim estaba apoyada en mi hombro durmiendo también.
Yo: ey ey-pasé la mano por delante del rostro de Andreas para que me viera-¿cuánto queda?
Se quitó los cascos.
Andreas: minutos... hace 5 que deberíamos haber llegado. Ha estado sonando tu móvil.
Lo cogí del bolso. 5 llamadas perdidas de mi madre. Joder que por llegar 5 minutos tarde no pasa nada!
****: Pasajeros del tren en aproximadamente 1 minuto llegaremos a la estación de Berlín.
Zarandeé a Kim para que se despertara.
Yo: ya hemos llegado-la susurraba.
Se levantó de un salto.
Kim: ¿ya? Qué rapidez...
Andreas: os habéis quedado fritas.
Yo: venga chicos Berlín.
Cogimos los bolsos de mano.
El tren se paró.
Berlín.
Ante nosotros.
Suspiramos y los tres a la vez saltamos del tren.
Berlín.
Debajo de nosotros.
Empecé a gritar y Kim se unió. Andreas miraba a todos lados pensando en la gente hasta que le cogí del cuello y empezamos los tres a gritar.
Al rato paramos.
Andreas: a por las maletas!
Kim y yo fuimos a por tres carritos.
Llegamos y cogimos nuestras maletas.
Andreas llevaba 2.
Kim llevaba 3
Yo llevaba 3 y una mini.
¿Qué queréis?
Vamos a vivir aquí. Había que llevar todo y tal... y volveríamos a coger decoración etc...
Cogimos un taxi y le dimos la dirección.
En el trayecto llamé a mi madre que según ella tardo más de 5 minutos en llamarla y estaba ya hablando con Bruselas.
El taxi nos dejó en una calle paralela a una muy transitada.
Un piso de muchas plantas se encontraba ante nosotros.
Andreas: allá vamos...
Cogimos las maletas y subimos al piso 7.
Andreas sacó la llave del bolsillo y la metió en la cerradura.
Kim: tenemos que hacer copias.
Asentí.
Andreas terminó de girar la llave y abrió la puerta.
Andreas & Kim & yo: alo chaval!

Lo que nunca imaginaste || Tom KaulitzDonde viven las historias. Descúbrelo ahora