Así que eso eran (Bars and Melody)

CAPITULO 60

G: -Tiene que venir conmigo. Me dijeron que usted le dijo a un compañero que le pegaron a su novia en el baño de mujeres. Es cierto?

Ch: -Si, pasa algo?

G: -Ahora mismo están viendo las grabaciones. Por si quiere ir.

Ch: -Cati – me llamó – están viendo las grabaciones de afuera del baño. Querés que vayamos?

Yo: -El tema es que tenemos que ir todos.

G: -No hay problema. Hay una sala de espera.

L: -Si, Cati. Vayamos, por ahí vemos quien fue.

Ce: -Leo tiene razón. Vamos? – el resto asentimos y el guardia nos llevó a un edificio cerca de donde estábamos.

G: -Por acá. Señorita – me llamó – venga por favor, usted también – le dijo a Charlie – el resto puede esperar en la sala de espera.

T: -Le digo a Maddie que venga para acá? – le preguntó a Leo quien asintió.

El guardia nos dirigió hacia una de las tantas puertas que había. Entramos y era una oficina con olor a café llena de computadoras, papeles y carpetas. Nos hizo sentar en las sillas que estaban al frente de un escritorio.

G: -A que hora fue mas o menos? – nos preguntó.

Ch: -A eso de las 5 pm.

G: -Ok – dijo clickeando varias veces – miren, acá están saliendo varias chicas, vamos a retroceder un poco – esperamos unos segundos – aca! Hay tres chicas con la cara tapada, 17:07 pm – anotó y lo leyó en voz alta – morena, pelirroja, dos rubias – volvió a escribir.

Ch: -No te acordás de qué color tenían los ojos?

Yo: -La pelirroja era de ojos celestes y una de las rubias también si mal no recuerdo. Las otras dos no me acuerdo.

G: -Muy bien... - anotó.

Ch: -Se puede ir a otra cámara? A ver antes de que se pongan los pañuelos y se les vea la cara.

G: -Si, un minuto – empezó a clickear y escribir varias cosas. Charlie movía nervioso la pierna izquierda y yo intentaba tranquilizarlo acariciándole la rodilla.

Ch: -Falta? – preguntó ansioso.

G: -No, ahí está – dio vuelta el monitor de la computadora para que viéramos y lo puso en reversa.

Parecía que se sacaban los pañuelos, pero en realidad era al revés.

Ch: -No puedo crerlo! – el guardia puso pausa al video.

Yo: -Pero no se ve nada todavía.

Ch: -Pero puedo reconocer ese perfil donde sea, es Chloe!

Yo: -Qué?! Chloe?!

G: -Chloe... - anotó – el apellido?

Ch: -Linsday, es la rubia de ojos claros – el guardia anotó lo que le iba diciendo – lo que no entiendo es qué hace acá, en Port Talbot.

G: -De donde es?

Ch: -De Frampton Cotterell, en Bristol – volvió a escribir en su libreta de hojas amarillas.

G: -Bueno, seguimos – tocó play y el video siguió reproduciéndose.

Depués de unos minutos, vimos las caras de las chicas que me golpearon. Charlie llamó a Leo para que entrara y viera si conocía a alguna.